La rubia se preparó hasta que de pronto los rayos impactaron en algo. Luego de disiparse la cortina de humo, pudo ver a un chico delante.

-En mis tiempos un dos contra uno se consideraba injusto -habló Goku con una sonrisa mientras limpiaba sus manos del polvo.

-¿Tú quién rayos eres? -demandó la gemela voluptuosa, que respondía al nombre de Hikari.

-Tu padre -respondió Goku burlescamente.

"Siempre quise decir eso"- discurrió Goku recordando varias películas donde quedaban escenas épicas. Esta no había sido menos.

-¡Miserable! -dijo Hikari cargando unos rayos.

-¡No te pedí que me protegieras hombre inútil! -exclamó la rubia mirando a Goku con una vena de enfado en la cabeza. El chico quedó atónito.

-Hey, hey, tranquila, ni siquiera te protegí, solo protegí mi casa -habló Goku señalando el suelo.

-Hmpf, como sea, largo de aquí, esta es mi batalla -respondió la chica apartando a Goku de su camino. El joven arqueó una ceja confuso.

-Hagamos que tu pelea sea más pareja, ¿de acuerdo? -declaró Goku lanzando un látigo negro hacia donde estaba Hikari y agarró su pierna.

-¡¿Q-qué rayos?! -Hikari se quedó perpleja.

Y sin más empezó a girar a la chica sobre los aires y con otro brazo creó otro látigo que enrolló la pierna de Hibiki, e hizo lo mismo contra ella.

Tras unos segundos y tras varias vueltas realizadas Goku arrojó el cuerpo de ambas por el cielo, perdiéndose de la vista de ellos dos.

-¡Hasta nunca! -exclamó Goku alzando el brazo con una sonrisa- Creo que no te molestarán más.

Goku arqueó una ceja al ver que la chica rubia respiraba con pesadez con la mano en el pecho.

-Oye, ¿te encuentras bien? -preguntó Goku agachándose a su altura con leve curiosidad.

-M-maldito, mi-mira lo que me has hecho, t-tendrás que pagar -la chica cerró sus ojos con fuerza y apretando más su pecho izquierdo.

Sentía una opresión no mortífera sino de un sentimiento bastante fuerte que debía liberar.

Y este sentimiento no surgió hasta que vio a Goku en acción, ¿por qué? No lo entendía ni ella.

Simplemente había surgido de la nada.

"Esta agua representa mi promesa"

"Purifica el mal que reside en mi Ashikabi"

-¿Pagar? -preguntó Goku cada vez más perdido.

Su perdición creció cuando la chica unió sus labios a los suyos, y de pronto salieron unas alas iluminadas en su espalda a raíz de aquel beso.

Aquel beso que había surgido de la nada.

"¿Qué demonios está pasando?"- Goku podía jurar que nunca había estado tan perdido como ahora. No comprendía nada, todo era confuso.

-Sekirei nueve, Tsukiumi, y a-ahora tú eres y s-serás m-mi Ashikabi -murmuró la chica con la mirada agachada. Parecía algo avergonzada.

-Creo que esas chicas te han tenido que dar un golpe fuerte en la cabeza -respondió Goku sonriendo. Tsukiumi frunció el ceño molesta.

-¡¿Q-qué estás diciendo?! ¡Tienes que hacerte responsable de mí a partir de ahora! -Tsukiumi le señaló con el dedo índice en tono de reproche.

-Uh entiendo -Goku musitó rascando su nuca antes de dar la vuelta para regresar a su casa y Tsukiumi apareció delante de él bloqueándole.

-¿Pero qué clase de hombre abandona a su mujer? ¿Dónde está tu hombría? -Tsukiumi le acusó haciéndole retroceder algunos pasos.

Goku suspiró en tono de rendición.

-Eres muy persistente. Está bien, es peligroso dejar a una loca suelta por la calle -dijo Goku con una sonrisa de cansancio- Llámame Son Goku.

"¡¿A quién le dices loca?!"

Goku suspiró al oír a Tsukiumi.

Adiós a su noche tranquila y en paz.

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Fin del capítulo.

¿Qué les pareció?

Estoy vivo, DanielMtx está vivo, la prueba verídica es que aquí un nuevo reto esta vez sobre Sekirei, ¡dejen votos y comentarios!

Sin más, nos vemos en el próximo capítulo.

DaimaWhere stories live. Discover now