Romance y Perjuicios.

Capitulo 21

Lauren pov

Entré a casa con mamá siguiéndome detrás, la sangre en mi mano se había secado. Y mamá se aseguró de salir de casa de Camila cuando Arthur estaba dentro de la ambulancia.

Iba subiendo las escaleras cuando mamá me detuvo.

-No, tú no vas a ningún lado- Me detuve en seco, mamá se notaba molesta. -Qué diablos te pasó ahí?!- Gritó. -Lauren mírame y dime, por que le hiciste eso?!-

Me volteé a verla.

-No respetaste su casa, a Camila, ¡NO LO RESPETASTE A ÉL!-

-Se lo merecía, y no me arrepiento-

Eso fue como una ofensa para ella, pues se llevó una mano al pecho.

-Pensé que habías cambiado, que habías mejorado. No puedo tener una persona así en mi casa-

-Me estás echando mamá?!- Pregunté con indignación.

-No hija, no...-

-Ese hombre no me respetó a mi! Me faltó en mi propia cara y en la tuya!-

Bajé las escaleras y caminé hasta estar frente a ella.

-Tú no me defendiste! Y ahora tienes el descaro de reclamarme porque le hice eso?-

Ella se quedó en silencio.

-Yo si tengo que respetar pero nadie a mi no?- Agarré a mamá por los brazos. -Dime mamá!- Le grité en la cara.

Y no me había dado cuenta del error que cometí hasta que mamá me empujó y me pegó en la cara.

-Yo soy tu madre, y no voy a tolerar tus mierdas. Me estás escuchando?-

Ella me pasó por el lado y subió las escaleras, dejándome sola y con la mejilla roja por el golpe.

****

Tres días pasaron, y yo no salía de mi habitación, solo salía cuando me daba hambre y me aseguraba de que mamá no estuviera en casa. No encuentro la manera para decir cómo me siento, lo cierto es que siento vergüenza por actuar de esa manera frente a mamá, y sé aunque ella no me lo diga que sintió miedo de mi.

Siempre he tenido problemas con la ira, ese es mi lado oscuro. Y he tratado durante tantos años controlar eso, pero es inevitable, cuando siento ira me vuelvo un ser un poco despiadado. Mamá no podía controlarme, entonces recurrió a médicos especializados para tratarme eso, pero nada funcionó, entonces me fui a vivir con papá, ella al igual que él pensó que allá yo cambiaría y que papá me ayudaría siendo severo.

Pero eso me puso más rebelde, el primer día que llegué tuve una pelea donde el chico llegó a parar al hospital. Y cuando papá me regañaba yo me revelaba sin importarme nada. Nadie sabía cómo tratarme ni que hacer conmigo, entonces comenzaron a alejarse y yo me refugié en mi misma y fui controlando un poco mi temperamento.

Unos pequeños toques en la puerta me sacaron de mis pensamientos. Mamá no estaba en casa, entonces quien podría ser?

Un poco asustada me paré de la cama, pensando que probablemente sería un ladrón, pero cuando abrí la puerta me encontré con mis mejores amigos; Dave y Ari.

Ellos entraron y de inmediato tomaron posesión de la cama.

-Tenemos mucho de qué hablar- Dijo Dave.

-Qué mierdas pasó?- Preguntó Ari.

-Golpeé hasta dejar inconsciente al esposo de Camila-

Mientras Ari tenía una cara horrorizada, Dave se reía a carcajadas.