Capítulo Cuatro

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Aunque Evelyn casi nunca había hablado con Tom Riddle antes, supo que era su voz incluso antes de tener la oportunidad de mirar hacia arriba. "Tom", dijo mientras sus ojos se fijaban en los de él.

"El vandalismo no es el tipo de cosas que te había propuesto para Evelyn Rivers", apartó la mirada de sus ojos y permaneció de pie de una manera que lo hacía parecer más amenazador de lo que Evelyn creía que era.

"No lo llamaría vandalismo, este libro me costó más que suficiente para poder hacer con él lo que quisiera. ¿Para qué tipo de cosas me tienes entonces?" Cerró su libro.

"Quidditch, ser prefecta, directora, ese tipo de cosas de estudiante perfecto."

"Puedo hacer ambos." Ella se levantó de su asiento así que ella estaba a su nivel.

"Sin embargo, uno podría causarte más problemas que el otro, no querríamos eso para ti, ¿verdad?" Él dijo.

"Lo tendré en cuenta, Tom. Muchas gracias por tu preocupación", puso los ojos en blanco, pasando junto a él, saliendo del patio y regresando a las mazmorras.

Evelyn sabía que Lily y Sara no habían terminado todavía, no que no eran capaces.

Evelyn sabía que Lily y Sara aún no habían terminado, no es que no fueran capaces, pero simplemente no podían realizar múltiples tareas y disfrutaban demasiado hablando. Al mirar dentro del salón de clases, los vio a ambos todavía revolviendo sus pociones y agregando ingredientes a su mezcla. Les dirigió a ambos una mirada suplicante, esperando que aceleraran su trabajo para que Evelyn pudiera salir de las mazmorras. Ninguna cosa en particular hizo que a Evelyn no le gustaran las mazmorras, pero simplemente la sensación general que tuvo cuando bajó las escaleras fue suficiente para inquietarla. No ayudó que el hedor de pociones mal preparadas fuera el único olor que circulaba por el área, haciendo que la mayoría de los estudiantes desearan no poder oler para salvarlos del horror. Muchos estudiantes tendían a tener dificultades con las pociones, lo que significaba que el olor estaba presente después de cada lección.

Finalmente, Lily y Sara pudieron salir de sus conversaciones y finalmente terminar. "Voy a ver si puedo encontrar a Tom, tal vez él pueda ayudarme con mis pociones". Sara se rió mientras salía de la biblioteca en una búsqueda inútil para seducir a Tom Riddle.

"Supongo que entonces llegará tarde a la clase de encantamientos", afirmó Lily, comenzando a dirigirse a la siguiente lección junto a Evelyn. Caminaron por interminables pasillos hasta que encontraron el aula de encantamientos y tomaron sus asientos habituales uno al lado del otro.

Evelyn adoraba las clases de encantamientos. Le encantaba aprender sobre cada hechizo y cómo funcionaba, el hecho de que sobresaliera en él también la hacía disfrutarlo más. Dado que sus exámenes mágicos ordinarios se acercaban rápidamente, sabía que rápidamente se convertiría en una lección más desafiante, pero Evelyn se sentía preparada. Había revisado el contenido que comenzarían a cubrir este año para no sentirse abrumada cuando el trabajo comenzara a acumularse, especialmente porque el Quidditch seguiría ocupando gran parte de su tiempo.

Una vez que todos los estudiantes estuvieron sentados y en silencio, el profesor Blackburn entró al salón de clases, aparentemente tan entusiasmado con el tema como el día que comenzó a enseñarlo. El profesor Blackburn era otra de las razones por las que Evelyn disfrutaba de sus lecciones de encantos más que la mayoría, él la favorecía por encima de muchos otros estudiantes y no trataba de ocultarlo. Cada vez que ella acertaba en una respuesta, él sonreía con orgullo como si estuviera mirando a su propia hija.

"Como todos saben, este año tomarán sus amuletos T.I.M.O., habrá una parte escrita y una parte práctica, comenzaremos hoy con algunas preguntas de repaso muy simples para prepararlos". Él sonrió, agitando su varita sobre la pila de pergamino haciendo que flotara por la habitación, una pieza colocándose frente a cada estudiante.

Evelyn sacó su pluma de su bolso y la sumergió en el bote de tinta brillante, lentamente comenzó a escribir y formar respuestas en su mente para cada pregunta. Después de reunir las respuestas en su mente, las transfirió al pergamino con facilidad. En media hora, Evelyn había terminado. Se recostó y observó cómo los otros estudiantes trabajaban en sus preguntas, cada uno garabateando en su pergamino.

Después de su sencilla lección de encantos, Evelyn se sentía renovada. Pasó rápidamente el resto de sus lecciones con facilidad y sintiéndose satisfecha, ya que solo recibió una tarea en todo el día. Evelyn se reunió con sus amigas afuera de la biblioteca y sonrió al verlas.

"¿Conseguiste encontrar a Tom entonces?" Preguntó Evelyn, volviéndose hacia Sara, que parecía avergonzada.

"Creo que he renunciado a esa tarea. No creo que esté lo suficientemente calificado"

"¿Cómo es posible que no estés lo suficientemente calificado? ¿Qué otras cualidades necesitas?" -Preguntó Lily, confundida.

"Necesito más paciencia, él simplemente no me habló y no quiero ser el único que lleva la conversación. No tengo la habilidad suficiente para lograr que hable". Sara sintió que las comisuras de sus labios comenzaban a fruncir el ceño.

"Siempre hay alguien más, Sara". Evelyn le dio a su amiga un breve abrazo, sorprendida por lo mucho que sentía por Tom. "No me di cuenta de que te importaba tanto, pensé que sólo querías un desafío.

"Sin embargo, no hay otro Tom, es emocionante. Todos los demás aquí son demasiado fáciles para mí". Ella suspiró.

El trío entró en la biblioteca, tomó sus asientos habituales sin decir una palabra y comenzó a perderse en su trabajo.

Masquerade¹ → Tom Riddle ✓Where stories live. Discover now