dos

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— te juro que no he hecho nada —insistió kyujin de brazos cruzados mientras su amiga la arrastraba a través de las escaleras hasta la oficina de la directora—. esta vez no.

— ¿y por qué nos llamaría la directora? ¡especialmente a mí! —protestó bae con molestia mientras se acercaba a tocar la puerta—. más vale que no hayas arruinado mi reputación.

— pff, ¿cuál?

bae estuvo a punto de lanzarle su cuaderno a kyujin cuando la puerta de la oficina se abrió.

— jinsol, kyujin, por favor entren —habló la señora haciéndose a un lado para que las dos chicas entraran en ese cuarto del terror, y se sentaran frente a ese escritorio viejo de madera—. las he citado para hablar sobre kim jiwoo...

— ¿le sucedió algo? —la mayor de las chicas interrumpió a la mujer, ganándose un codazo por parte de kyujin.

— señorita bae, por favor le pido que no se altere —continuó la mujer, colocando sus manos sobre el escritorio—. ¿tienen conocimiento sobre algo que pudiera estar afectándole? algún problema familiar, tal vez.

— no —kyujin respondió por ambas, bastante confundida y preocupada de no saber qué le había ocurrido a su amiga—. ella tiene una excelente relación con sus padres, y no parece estar molesta por nada.

la directora asintió al testimonio de jang, sin emitir respuesta.

— ¿qué le sucedió? —insistió bae nerviosamente, fijando sus ojos en la mujer.

— su profesora de teatro la encontró en la sala de música —la mujer se abstuvo de dar más detalles—, se quitó la vida.

( . . . )

lily despertó poco a poco sobre la camilla de la enfermería completamente aturdida y sedienta, no recordaba cómo había llegado ahí ni que había sucedido antes.

apenas intentó sentarse la figura de haewon apareció a su lado tomándola de la mano.

— ¿cómo te sientes? —preguntó la de cabello oscuro en un suave tono de voz al notarla confundida.

— bien... eso creo —respondió con la voz levemente ronca, y se llevó una mano a la cabeza, notando por la escasa luz a través de la ventana que estaba oscureciendo—. no recuerdo nada.

—te desmayaste —dijo la más baja, viéndola con preocupación, y suavemente le acomodó el cabello fuera de su rostro—. iré a buscar a la enfermera.

la rubia no quiso protestar, y volvió a recostarse con el cuerpo y la cabeza adoloridos una vez se quedó sola en la oscura habitación.

la frustrada y veterana enfermera solo controló su temperatura y la envió a su habitación para hacer reposo por el día siguiente, cosa que lily tomó sin mucha importancia y del brazo de haewon se dirigieron a su habitación.

— estaré bien —aseguró la rubia una vez se sentó en su cama con la baja a su lado—. lamento haberte preocupado.

— no te disculpes por eso —respondió la castaña algo desconfiada, lo que se notaba en su mirada que trataba de escanear a lily—. prometeme que vas a descansar, no quiero que te pasé nada.

— no me pasará nada —insistió lily, dedicándole una agotada pero luminosa sonrisa a haewon, entonces ésta última sintió cómo su corazón daba saltos dentro de su pecho cuando lily solo colocó su mano sobre la de ella—. gracias por cuidarme.

haewon se quedó en blanco sonriendo tontamente, y aún más cuando lily acercó su mano a su cabello para quitarle una pequeña flor que le habría caído en el jardín.

— no te dis... digo, no me agradezcas por eso —dijo riendo nerviosamente, aún con una tonta sonrisa en el rostro.

entonces la vibración del teléfono de haewon interrumpió el momento, y ésta al solo ver la pantalla cambió su expresión completamente.

— enseguida vuelvo —dijo en un balbuceo, y salió de la habitación.

lily no quiso parecer entrometida, así que solo se quedó sentada en la cama. pero entonces un dolor repentino en su cabeza la hizo cerrar los ojos unos segundos, y al abrirlos se encontró con una figura femenina asomándose por la puerta de su cuarto.

suspiró temblorosamente y volvió a cerrar los ojos.

no es real, no es real...

al abrirlos, ya no había nadie, pero medio segundo después esa figura femenina pasó corriendo en dirección a donde haewon se había ido.

haciendo caso omiso a las indicaciones de la enfermera, se colocó su chaqueta y salió del cuarto, aún tambaleándose, y ahora nuevamente adolorida.

caminando por el pasillo se dio cuenta que la última luz antes de llegar a la escalera estaba parpadeando, y se percató de la chica de espaldas.

quiso hablarle, pero se dio media vuelta dispuesta a regresar.

¿puedes verme? —dijo la voz a sus espaldas.

sus latidos se aceleraron hasta creer que su corazón saldría disparado, y corrió hasta poder encerrarse en su habitación.

creyendo que se había acabado la luz de la habitación se apagó, pudieron escuchar el pequeño interruptor bajarse a su izquierda.

respiró hondo y extendió la mano sin moverse un solo centímetro, pero la luz no se encendió al presionar el interruptor, y una fuerte respiración en su cuello la hizo salir corriendo del cuarto y posteriormente a las escaleras para subir al piso de sus amigas.

se detuvo frente a la habitación de jiwoo y sullyoon, y un fuerte sentimiento la envolvió al colocar su mano en la perilla.

entonces una mano en su cintura la hizo girar bruscamente soltando un grito.

— ¡lo siento! —dijo haewon retrocediendo unos pasos al asustarse igualmente—. ¿qué haces aquí? creí que estarías descansando.

lily la vio en silencio unos segundos, y haewon parecía estar bien, pero la australiana sabía que sucedía algo, y sentía un vacío en el estómago; no quería saber qué.

— ¿qué sucedió? —preguntó la rubia con la voz temblorosa, y los ojos de la castaña se humedecieron antes de que la atrajera en un abrazo.

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⏰ Last updated: Sep 09, 2023 ⏰

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' talking to the afterlife ' nmixxWhere stories live. Discover now