ADD [Suguru Geto y tú]

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Los rumores empezaban a hacerse presentes, para tu buena o mala suerte, te involucraban directo con Suguru. No te molestaba si lo pensabas pero, tenías miedo, el sentimiento de cariño comenzaba a crecer más o más, sabías que poco a poco te empezabas a enamorar de aquel pelinegro. Amor a través de regalos, de manera inconsciente, lo hacías, te gustaba ver el rostro de Geto feliz por recibir algún regalo. Por ejemplo, hoy llevabas cinco tomos. Paradise Kiss. La caja era simple, linda, tenía una nota con una bonita caligrafía. Solo pensar en Geto te hace sonrojar. Lo habías escuchado de sus amigos, pero nunca lo mencionaste, le gustas, con horrores.

Te había dicho ayer que no se verían en todo el día, lástima, la manera en la que soltaba aquellas palabras, como si de verdad le doliera no verte, mientras acariciaba tu rostro, ¿en qué momento se volvieron tan cercanos?

ーEntonces, ____, ¿qué haremos con el proyecto de este semestre?

La voz de Itadori, uno de tus compañeros de clase, de los pocos amigos que tenías. Tenías otra compañera, Nobara pero ella estaba en la carrera de diseño de modas.

ー¿Qué te gustaría hacer?

ーDarme de baja de la carrera.

ーPreferiría alguna opinión con respecto al proyecto.

ーAh, no lo sé, ¿una exposición? ¿una escultura? ¿un comercial?

ーBuenos ya pensaremos en eso.

ーVamos a comer.

Expresó frustrado el pelirrosa.

ーTengo mucha hambre.

ーVamos pues.

Comenzaron a caminar juntos, en la cafetería se encontrarían con Nobara y Megumi.

Estabas cansada, recordaste algo y te detuviste de golpe.

ーChicos, los tengo que dejar, los veo en la siguiente clase.

ー¡No! Te vas a ver a Geto-san.

Menciona melodramático Itadori.

ーMe siento abandonado por mi amiga.

ーYa, ya, está semana acomodaré mejor mis horarios y así salimos a ver esa película que tanto quieres.

Diste en el blanco, Itadori se despidió de ti con una sonrisa y un brillo en los ojos que siempre te hacía sonreír.

Tenías que ir a ver a tu lindo chico, con lo que pasó, ese horrible accidente.

Bueno, es miércoles y Geto sigue en reposo, lo fuiste a ver a su habitación el lunes pero ayer dijo que no te podría recibir así que hoy ibas con el regalo ya preparado para verlo.

Suspiraste yendo hasta la parte de la residencia de ellos, Geto, Gojo y Shoko vivían en una residencia distinta, también era para estudiantes pero específicamente ese grupo tenía un nivel económico más alto. Tú en tu caso vivías del otro lado, diferencias económicas.

Tocaste su puerta, no sabías si estaba Gojo con él, el domingo que llegaron a su departamento se quedó, solo se separó de su amigo cuando te tuvo que llevar de vuelta a tu departamento.

Al no escuchar a Satoru entraste sin más.

ー¡Geto, estoy aquí!

Gritaste para avisar, si contestaba estaba despierto y si claramente no contestaba es porque dormía.

Seguiste caminando hasta su habitación y efectivamente, estaba muerto, perdón, dormido. Dejaste la caja en su escritorio y fuiste hasta su cama. Su rostro solo de perfil, sus labios estaban entreabiertos y sus finos ojos, cerrados. Toda una maravilla visual.

ーHey, ¿ya comiste?

Susurraste, tocándole el cabello ya largo que traía, Geto no se inmutó, y tú no querías despertarlo, tomaste tu celular para sacar algunas fotos, solo para tener un recuerdo.

ーCon que tomándome fotos.

Ni siquiera abrió los ojos, maldito presumido.

ーAhora sí contestas.

Guardaste el celular y él simplemente hizo lo que haría cualquiera en su situación. Tomó tus manos y te jaló haciendo que quedarás acostada junto a él.

ーMejor.

No te iba a soltar aunque se lo pidieras de favor.

ー¿Cómo sigues?

Recordar ese día te daban ganas de llorar.

ーComo ya llegaste, me siento mucho mejor, casi podría ir a la escuela...

ーNo se te ocurra.

Uy, estabas sensible con Geto, era un maldito aprovechado porque tenía toda tu atención y cuidados de su lado.

ー¿Ya comiste algo?

ーSatoru hizo una sopa toda asquerosa.

ー¿Quieres que te cocine algo?

Sí, si quería pero preferiría pedir algo en el delivery.

ーQuiero hamburguesas.

Negaste mirando su cuello, harías algo atrevido porque aún estabas en clases, y si seguían así, él no te soltaría.

Tu respiración chocó con la nuca del pelinegro y eso erizó sus vellos.

ー¿Qué haces?

ーTengo clases.

ーTe consigo un justificante y asunto arreglado.

Suguru Geto alias la mala influencia.

ーPide las hamburguesas y te dejo ir. Soy un hombre de palabras.

Si Geto quería algo, lo conseguía, ya tenía tu atención ahora quería comer hamburguesas contigo.

No discutiste, pediste lo que quería el pelinegro, era demasiada comida pero no cuestionaste.

Terminando la llamada otra vez te atrapaste entre su cuello.

ーLamento lo que pasó ese día. Estaba muy asustada, y, siento algo de culpa por llevarte ahí.

ーNo es culpa de nadie, bueno, mía, por estarte viendo, pero, ya pasó, solo tengo que estar en reposo y si me vienes a ver los demás días, me sentiré más feliz.

Esa escena tan íntima, los dos compartiendo ese amor y calor.

ーTe quiero, ____, gracias por venir.

Un dulce beso, un beso en tu mejilla, los.labios de Suguru se sintieron tan suaves.

¿Te quería besar en los labios? Sí pero aún tenía secuelas de dolores en la cabeza por el golpe así que no quería tener esa plática en su condición. Pero claro que te diría sus sentimientos, solo, necesitaba hacer algunas cosas para ser todo tuyo. Eso era lo que quería.