Primer día de clases, escuela nueva, no conoces a nadie, estas nervioso, todo pasa por tu mente, ¿Cómo estará la escuela?, ¿Los maestros serán muy exigentes?, cosas como esas me ponían nervioso, entre a la escuela, era pequeña, bueno muy pequeña, creo que mi secundaria era más grande pero ni modos me toco aquí, estuve buscando en donde estaba mi salón, iba tarde, entonces estaba corriendo buscando mi salón llegue al salón, veo a la profesora y le digo -Puedo pasar-, ella me dice, -Este es tu salón ya revisaste bien-, afirme con la cabeza,-Pasa- me dijo, -Gracias profesora- le conteste, lo primero que observe era en donde había lugares vacíos, para mi mala suerte estaban en el medio, me senté y observe a mis compañeros, éramos como 50, 45 hombres y 5 mujeres, las cuales no estaban muy bonitas que digamos, y veo a Mario, un compañero con quien estuve en la secundaria, después de que acabo la primera clase me cambie de lugar a donde estaba Mario, -Hola- le dije, me dijo -¿Qué paso? ¿Cómo estás?-, -Bien le conteste.
Me presento a las personas que había conocido,-Él es Miguel, el Ricardo y él es Omar-, -Hola- les dije, y se empezó a hacer una charla interesante, la timidez desapareció, me sentí con personas de confianza.
Con ellos estuve todas las clases, platicando, riéndonos, cuestionando, y también aburriéndonos.
Todo el día fue increíble aunque nos dejaran bastante tarea, -Hasta luego, nos vemos mañana- les dije, ellos me respondieron casi como en coro -Va nos vemos-, y ellos se fueron a tomar en camión y el metro, mientras yo tenía que esperar a mis papas que iban a ir por mí, llegaron 10 minutos después de que salimos, -¿Cómo te fue?- me dijo mi mama, le conteste -Muy bien gracias-, -Que bien hijo y ya hiciste amigos-, -Si-, se quedaron boquiabiertos, ya que no soy de las personas que hago amigos muy fácil, y si tienen razón si no me hubiera tocado en el mismo salón que Mario no hubiera platicado con nadie. Llegando a mi casa a mi cuarto, en mi escritorio, todo sucio de que no lo limpiaba hace mucho, puse mis cosas para hacer tarea pero no la hice, estaba cansado, me eche a la cama y me quede profundamente dormido.
Este recuerdo me detuvo al momento de querer hacer lo que estaba a punto de hacer en el puente, me salió una sonrisa y me senté, tratando de recordar lo que sucedió después...
