Penélope despertó de un sueño profundo, sintió un aroma conocido que de alguna forma la hacía sentir cómoda y en paz, la peliroja estaba demasiado perezosa como para abrir sus ojos, estaba Acostada deleitándose del aroma que desprendía la almohada, luego decidió abrir sus ojos y se encontró en una habitación que nunca había visto antes, estaba completamente sola en esa habitación recorrió con sus ojos y notó en la mesita de noche que estaba a su derecha un libro con carátula de cuero marron, parecía algo desgastado, llamando la atención de una ratona de biblioteca como es ella, guiada por la curiosidad tomo el libro y decidió abrirlo, estaba escrito a mano e inmediatamente reconoció la letra; ese libro lo escribió Colin, estaba decidida a dejar el libro pero sus relatos eran fascinantes, explicaban a las perfección cada detalle, haciendo que el lector se traslade a ese sitio, explicaba los colores, los olores, las sensaciones, las texturas, los sabores, de una forma tan poética y real que hacían que la peliroja deseara estar allí, nunca pensó que la vida más a allá de Londres fuera tan fascinante, claro Colin siempre le contaba sus aventuras en sus cartas pero nunca fue así de explícito; sin notarlo la joven ya había devorado diez páginas enteras, en ese momenta la puerta de la habitación se abrió y apareció la figura del dueño de ese pequeño diario quien al notar a Penélope leyéndolo se apresuró arrebatarselo de las manos.
- ¿No sabes que es de mala educación leer diarios ajenos? - Colin la miró con seriedad y por su voz parecía algo enojado.
- Lo siento - Penélope se encogió como niña regañada- Yo juro que iba a dejar de leer...
- ¿Cuándo no quedarán más hojas por leer? - interrumpió Colin hablando sarcásticamente. Penélope se sonrojó avergonzada.
- Es tu culpa... No deberías dejar tu diario así a simple vista - dijo Penélope apresuradamente.
- ¿En mi habitación? - Colin preguntó está vez divertido - ¿Que tanto leíste?
- como diez páginas - Penélope desvío la mirada haciéndose la desentendida.
- ¿Diez páginas? - exasperó Colin
- Es tu culpa por haber escrito esos relatos tan interesantes... Simplemente no pude. Dejar de leer - la joven observó a caballero con ojos de cachorro triste. El caballero suspiró hondo y le dedicó una dulce sonrisa.
- Bueno, está bien si eres tú quién invade mi privacidad - Colin se acercó y acarició la mejilla de la dama - ¿En serio es interesante?
- Es muy bueno Colin... Esos relatos son extraordinarios, deberías escribir un libro con todas tus aventuras - Colin sonrió tímidamente y dijo
- ¿Quien leería ese libro? - por primera vez Penélope vió a un Colin inseguro.
- Yo lo leería mil veces - Penélope le acarició el cabello - En serio, tu libro es muy bueno.
- Yo, siento que no he hecho nada con mi vida... Anthony es tan bueno en sus negocios y en todo lo que hace, Benedict consiguió su pasión y su obra está en un museo importante.. mientras que yo lo único que hago es huir - Colin estaba cabizbajo - De mí lo único que dicen es que soy "El aventurero encantador" no soy nada más.
- Es que eres Encantador - Penélope comentó en tono burlón - al menos no te llaman la fea del baile o patito feo.
- Ahora eres la "Encantadora mariposita" - dijo el caballero divertido mientras poco a poco se acercaba a Penélope con la intención de besar sus lindos labios. Pero en ese momento entro Eloise a la habitación quien al ver a Colin tan cerca de Penélope comentó bruscamente
- Creo haberte dicho que tienes prohibido el acceso a esta habitación.
- ¿A mí habitación? - Colin habló divertido.
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La Fea que te amó // Bridgerton.
फैनफिक्शनEs una Historia basada en las novelas de Julia Quinn, tomando como protagonistas a Penélope y Colin. Luego de Escuchar como Colin se burlaba con sus amigos de ella, llamándola fea, Penélope toma una decisión, borrar para siempre a Colin Bridgerton...
