Estirpes de Linajes (Descubriendo la verdad)

Capitulo 2

A Lyam no le importó y se lo llevó con ellos. Al llegar al campamento soltaron la caza, Jules fue directo hacía a la hoguera para preparar las brasas y poder cocinar la carne. Marlene y los demás se acercaron a preparar la carne como debía cocinarse, para poder darselo a Jules y ponerlo en la hoguera. Venelope acabó de llegar con Cleit de ir a buscar agua en un oasis que había cerca de ellos. Al dejar el agua cerca de donde iban a comer, se giró a mirar a Lyam, él estaba tratando de dar de comer al cachorrito, ella vio al pequeño animal y le encantó. Fue directa hacía él, se lo quito de las manos, empezó a darle mimos diciendo lo mono y precioso que era. Lyam se volvió a quitar diciéndole: - ¿Quién te ha dado permiso para quitármelo así?- Venelope le contestó: - Si no te pega, eso le pega más a una chica guapa como yo, no un bruto como tu. Aparte es una norma de nuestro grupo, todo es de todos. - Dijo bien orgullosa. Lyam le respondió: - Como que todos es de todos. Ésa normal no existe te la acabas de inventar. - Cleit les gritó: - ¡PARAR YA! Sois muy mayorcitos como para estar discutiendo sobre eso. Comportaos como verdaderos héroes que sois. - muy enfadado él, mientras les arreaba con su bastón Gloria. A lo que le contesta Lyam:

- ¿Como sabe que tenemos más edad de la que aparentamos?- dijo bien inocente. Jules y Venelope fueron rápido a tapar la boca de él y agarrarlo para que no se moviera. Cleit le dijo: - ¿Como has dicho niño?- bien extrañado por la respuesta del muchacho. Venelope le respondió: - No le haga caso, creo que le dio bastante fuerte con ése bastón, lo dejó medio tonto. Ahora venimos, darnos un minuto. - dijo bien nerviosa para disimular. Jules y Venelope se llevaron a Lyam atrás de unos cactus para hablar con él.

Jules le dijo en voz baja: - Casi metes la pata, ellos no saben nada de donde venimos. - Venelope le respondió: - Exactamente, ellos solo saben que fuimos elegidos por el dios y nada más. - Lyam se levantó y les contestó: - Eso se dice antes, fui el ultimo que se unió. A partir de ahora tendremos que tener más comunicación. Ah una cosa más. Si ése pequeñajo va a ser de todos nosotros, algún nombre habrá que ponerle. - Jules le respondió: - Como queráis, yo no voy a cuidarlo, todo vuestro. - en ése momento escuchó a Venelope diciendo <Siempre me ha gustado el nombre de Astharoth.>, Jules le respondió: - Ése nombre me gusta Venelope.- Ella le contestó: - ¿Que nombre? Yo no dije nada.- Jules extrañado le dijo: - Acabas de decir el nombre de Astharoth. - Venelope le contestó: - Yo no he dicho nada, yo solo he pensado ése nombre. ¿Parece que leyeras la mente, no sería fantástico? Pero, oye. Si os gusta podemos llamarlo así. ¿Que te parece Lyam?- él le respondió: - Si, me gusta mucho. Así se llamará. - Venelope y Lyam se dirigieron de vuelta hacía el campamento, Jules se quedó atónito sin saber lo que había pasado en ése momento. Así que Ging intervino y le dijo: - Jules, parece ser que mi habilidad para leer las mentes o llamado "Telepatía" te la estoy transmitiendo. Cada día me sorprendes más, es un honor ser tu compañera de viaje. - Jules pensó que sería muy útil ésa habilidad en combate, solo debía de aprender como poder activarla o usarla sin tener que esperar a que sucediera. Así que solo le tocaría ir practicando con los compañeros de viaje para encontrar el detonante. Una vez regresados todos al campamento, se pusieron a cenar, ha conversar, reírse de los chistes, todos se divertían y llegó la hora de dormir para poder continuar el viaje hacia la capital de Portaven,