The Beginning

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—¿Eh?—. Ese fue el primer sonido que escapo de su boca al ver a todas esas personas enfrente suyo.

Viajando por toda la sala podemos ver toda clase de personas (y razas), personas conocidas a nivel mundial, había marines, piratas, revolucionarios, incluso los 3 almirantes, pero lo que más les sorprendía a las personas de la sala eran los 4 (3 en ese momento) emperadores delante de sus ojos, mirándose a muerte retando a alguna persona en la habitación a moverse y romper la falsa paz instalada en ese momento.

Los aldeanos de cada isla se alejaron lo más que pudieron de los piratas, los marines se alejaban de los piratas y los piratas también, mientras ponían distancia entre ellos mismos, los revolucionarios se hicieron hacia atrás en algún rincón, el almirante de flota Sengoku ordeno a los infantes de la marina proteger a los civiles, probablemente vuele sangre sobre sus cabezas.

Alejado de los emperadores, Doflamingo se ríe. Él piensa que quien sea que los haya traído aquí sabía como poner las cosas de cabeza, se sentó en una silla detrás de él y se dispuso a mirar el espectáculo con su familia a su lado. Podrá gustarle el caos pero no formar parte de el (La mayoría de veces). 

Todos esperaban que la primera palabra viniera de alguno de ellos, pero vino del almirante de lava. Con el ceño fruncido exclamo a los cuatro vientos —Sucios piratas ¡¿Qué fue lo que hicieron?!— Su lava aclamaba por sangre, sangre de todos los criminales reunidos en ese lugar.

—Sakazuki, cálmate— Lo que menos deseaba el almirante de flota en esos momentos era un baño de sangre, y como Akainu no pare de hablar, eso es lo que todos obtendremos.

El hombre más fuerte del mundo, Barba Blanca, decidió tomar la palabra — Primero lo primero, ¿Quién nos trajo aquí?— Ante esa pregunta, la habitación quedo en un silencio sepulcral, todos esperaban que otra persona admitiera, pero eso no paso.

Alguien en el fondo grito— ¡QUÉ BUENA SIESTA!— Sin saber la situación actual.

El comandante de la 2 división de los piratas Barba Blanca que antes estaba preparado para cualquier orden que diera su capitán, volteo su cabeza de un latigazo hacia ese grito. Deseando de corazón no saber a quien le pertenece. Pero cuando lo vio no le quedo ninguna duda, era su idiota hermano menor.—¡LUFFY, NO PUEDES GRITAR ASI EN ESTE LUGAR!—. Marco, su compañero de tripulación, se aguantó las ganas de decirle que él también estaba gritando.

Las personas a su alrededor murmuraban sobre la relación entre ellos dos.

Ace se abrió paso entre la gente que estaba en el medio para llegar a su hermano. —¿Ace?— Un golpe. —Idiota, ¿En qué estabas pensando?— El hermano mayor miro al hermano menor.

—¿De qué estás hablando?, acabo de levantarme-... ¿¡ACE?!— Luffy era un poco lento.

—Escúchame atentamente Luffy, estamos en un lugar muy peligroso, así que quédate a mi lado ¿Entendiste?—. Al verlo mirar a todos los lados en lugar de su cara, Ace saco su carta maestra —Te daré carne—.  

...

Por otro lado, Emporio Ivankov va hacia el rincón junto con los revolucionarios acercándose a su amigo Dragón, ninguno sabe lo que pasa y solo se quedan a la expectativa. Un rubio se acerca más a su jefe, ambos se dan una mirada decidida. 

Marshall D. Teach o también conocido como Barba Negra, se alejó lo más posible de la vista del Yonko esperando no llamar su atención, después de lo que hizo sabe que si lo atrapa es hombre muerto.  

—¡Oyaji!, ¿Podrías dejar que él se quede con nosotros?, es mi hermano menor—. Susurra lo último, lo que menos desea el azabache mayor es que sus enemigos se desquiten con su hermano menor.

Watching |One Piece|Where stories live. Discover now