01 | Bienvenida a Bahrain

233 29 12
                                    

Zarah's pov
A unos días del GP en Sakhir, Bahrain 

Odiaba viajar.

Aunque en definitiva odiaba muchísimo más viajar en compañía de mi padre.

Para ser un exitoso hombre de negocios e inversionista criado en aquel ambiente transitorio entre múltiples países no llevaba nada bien eso del pánico a las alturas, si me preguntasen a mí me atrevería a decir que era una muy mala combinación. Afortunadamente yo no corría con esa misma suerte por lo que, mientras él se encontraba hiperventilando en su asiento a un lado de Natalie, yo me dedicaba a realizar mi rutina de skincare con una habilidad sorprendente.

Tómala anciano, algo en lo que soy mucho mejor que tú.

—¿Cómo carajos puedes estar tan tranquila sabiendo que esto se puede caer en cualquier momento? —pronunció tomando un sorbo de lo que adivinaría era whiskey, un asco.

Me dejé caer en mi asiento con tranquilidad antes de responder —Siempre quise ver un concierto de los Beatles en vivo.

—¡Zarah!

Ruedo con los ojos con molestia, si no querían mi opinión pues para que preguntan.

Para ser sincera ya ni debería sorprenderme esto último, nuestra relacion profesional se caracterizaba mucho por ser básicamente mi padre actuando más como un jefe que como figura parental, si el ordenaba algo eso se cumplía, aún si no quisiéramos que fuera así. Solía ser bajo la excusa de "es por nuestro bien" y muchas veces podría admitir que tenía razón, la mayor parte del tiempo.

O por lo menos yo aún era lo suficientemente estúpida como para seguir creyendo que las cosas que hacían seguían aquella excusa.

No mucho tiempo después llegó una azafata informando que quedaba poco para finalmente aterrizar.

Bien, mi trasero ya se estaba transformando en un cuadrado.

—Que dramática, solo fue un viaje de 5 horas —respondió Natalie en lugar de mi padre. Ups, entonces no lo dije en mi cabeza como creí.

—Hubiera sido menos si hubiéramos ido en el jet —señalé lo obvio volviendo a colocarme el cinturón que había desabrochado hace algunas horas, detestaba usarlo porque sentía como si me cortara la respiración.

Mi padre chasqueo la lengua antes de aferrarse al asiento para contestar.

—Ya te dije que no seguiré mimándote después de lo que hiciste en Mónaco.

—Solo fue una jodida pelea sin importancia, hablas como si me hubieran arrestado —me encogí de hombros.

—¡Pero si te arrestaron! —exclamó enojado olvidando por un segundo donde se encontraba.

Pocas veces lo veía perder la compostura como en aquella ocasión por lo que solté una pequeña risa oculta tras la revista que había tomado para disimular, la dura mirada de Natalie me confirmó que había fracasado por lo que me aclaré la garganta antes de responder.

—Bueno ya aprendí la lección, ¿puedo regresar a mi vida normal?

—Aún no has aprendido una mierda, Zarah —escupió rápidamente.

—Le diré a Marcus que andas diciendo palabrotas —Marcus era nuestro asesor de imagen y no había cosa que odiara más en el mundo que las malas palabras, apostaba que en su otra vida debía haber sido el propio apóstol Santiago.

Un resoplido de su parte fue lo último que pude escuchar antes de colocarme mis audífonos dispuesta a ignorarlos lo que restara de camino.

[...]

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 23, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

𝐌𝐀𝐒𝐓𝐄𝐑𝐏𝐋𝐀𝐍, 𝗹𝗮𝗻𝗰𝗲 𝘀𝘁𝗿𝗼𝗹𝗹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora