Destinos entrelazados (omegaverse) [FINALIZADA]

❥ ; 6 - ¿Fue un sueño?

Los gemidos de Tighnari fueron silenciados por un nuevo beso mientras Cyno aceleraba sus movimientos, sintiendo lo que iba a pasar muy pronto. Percibió como el omega se estremecía y le abrazaba fuerte en el momento del clímax y sus feromonas le envolvieron de una forma de lo más atrayente. Cyno no pudo más y por fin el orgasmo le azotó como nunca.

Se apoyó sobre él con la respiración totalmente agitada y poco a poco fue tomando consciencia de nuevo. Entonces se dio cuenta de lo que acababa de hacer, hubiera jurado que había dejado de respirar mientras observaba al omega completamente desnudo y prácticamente dormido sobre su cama. No, eso no podía ser... pero sí que podía ser. Acababan de hacerlo por primera vez, con el marido de su jefe. Se separó abruptamente de la cama y comenzó a ponerse la ropa. Si Alhaitham se enteraba estaba muerto, ahora sí que lo mataría sin dudarlo. Sin embargo, cuanto más miraba a Tighnari más crecía esa sensación en su pecho.

"Mío..." Decía su mente, pero no podía enfrentarse a Alhaitham, a un alfa, menos cuando eso le destrozaría la vida a Tighnari y eso era lo que menos quería en ese momento. La mejor idea que tuvo era arriesgada, pero debía salir de aquella situación de la mejor manera para ambos, así que aprovechó que Tighnari dormía y se encargó de limpiarle un poco, volver a vestirle con mucho cuidado y sacarlo de allí. Por suerte había encontrado la tarjeta de la suite en el suelo así que en poco rato ya le había tumbado sobre su propia cama. Esta vez se alejó rápidamente y salió de allí.

No le costó encontrar a Alhaitham entre la multitud, aunque al llegar al grupo de alfas todos se giraron hacia Cyno. Claro, apestaba a omega en celo. Tuvo miedo por un momento y se tensó, listo para recibir algún golpe que, por otra parte, se merecía. Pero esto nunca llegó.

—¿Tighnari?— preguntó Alhaitham y Cyno agachó las orejas.

—Está en la habitación, señor. Venía a buscarle, está entrando en celo.

Como si nada, Alhaitham se alejó de allí a paso ligero y subió hasta la suite. La noche de bodas parecía haber empezado antes de tiempo, pero le daba igual, lo único en lo que podía pensar en ese momento era en Tighnari.

ꕥ

Ya habían pasado dos semanas de la boda y en la casa todo parecía bastante tranquilo. Los empleados aún hablaban de lo bonito que había sido y de la buena pareja que hacían los novios, sin poder imaginar que cada comentario era una nueva puñalada en el pecho de Cyno.

Después de aquella noche, no había vuelto a ver a Tighnari. Los recién casados habían marchado hacia su luna de miel justo después y muy pronto volverían a casa. Cyno no había pasado ni un solo minuto sin pensar en lo ocurrido, los recuerdos eran vívidos en su mente y la sensación de vacío en su interior resultaba desoladora, tanto que llegó a pensar en marcharse de la casa en varias ocasiones. No podía seguir viviendo mientras veía a Tighnari con su marido, no podía saber que jamás iba a poder ser suyo de verdad y le hervía la sangre solo de imaginar que Alhaitham le pusiera las manos encima. Sin embargo, la idea de no volver a ver a Tighnari era aún más dolorosa. Así que se quedó, aunque no podía imaginar cómo iba a sentirse en el momento en que regresaran.

Ese momento llegó antes de lo que pensaba. Tighnari apenas había podido ver nada en sus vacaciones pues las había pasado en celo casi todos los días. Estaba cansado, le dolía todo el cuerpo y apenas se acordaba de nada. Un alfa dominante con un omega en celo no medía su fuerza, las hormonas hablaban por ellas mismas y a Tighnari no es que le disgustara, es que no pensó que tendría consecuencias después. Sin embargo, volver a casa le aliviaba, le gustaba estar en un entorno conocido y seguro. Se bajó de los brazos de su marido y caminó un poco por el pasillo.