Dulce como el pastel [BL - Cakeverse] © (Resubiendo) ✔

Capítulo 5. Sólo un poco más

Capítulo 5. Sólo un poco más

Nino:

Siempre he creído saber el cómo sentirme cuando beso a alguien pero ahora mismo que lo estoy haciendo con Marshall no sé cómo hacerlo, me siento torpe e inexperto, más porque mis labios no se han movido, sólo se mantienen sobre los suyos como si esperara a que algo sucediera.

Abro los ojos y veo que los suyos miran los míos fijamente, como si intentara descifrar esta valentía repentina que surgió de mi parte. Me alejo un poco sintiendo los nervios recorrerme de pies a cabeza y cuando pienso que no puedo ser más patético, los balbuceos sin sentido me atacan.

—Lo-Lo siento —titubeo desviando la mirada—. No sabía cómo empezar y pensé que... bueno, creí que estaría bien si yo tomaba la iniciativa... yo... bueno... por favor discúlpame si te tomé por sorpresa.

Marshall no dice nada, creo que está enojado, la verdad no lo sé pero no lo culparía si lo está, es decir, ataque sin avisar, claro que puede estar confundido por mi tonto intento de valentía.

—Discúlpame...

—No vuelvas a decir eso jamás, Nino, porque yo también quería tomar la iniciativa —no entiendo a qué se refiere pero antes de que pueda volver a decir otra cosa son sus manos las que toman mis mejillas esta vez haciendo que lo mire y cuando intento hablar él se inclina y sus labios se posan sobre los míos.

Parpadeo varias veces mientras sus labios se mantienen sobre los míos y después de un par de segundos comienzan a moverse. Me besa lento, suave, tierno, como si cuidara cada centímetro de mi boca con cuidado de no hacerme daño. Es bueno. Poco a poco cierro mis ojos dejándome llevar y muevo mis labios con los suyos ladeando mi cabeza dándole mejor acceso a mi boca.

Una de sus manos se coloca detrás de mi cabeza presionando nuestras bocas aún más y cuando siento que ambos estamos entregados en esto abro mi boca dejando que su lengua entre en mí encontrándose con la mía. Siento la calidez que desprende cuando danza con la mía y por inercia mis manos se colocan alrededor de su cuello presionándolo más contra mí.

Me besa con decisión, como si quisiera succionar todo el sabor de mi boca y el aire que respiro haciendo que entierre mis dedos en su cabello cuando mis manos suben.

Marshall besa la comisura de mi boca varias veces cuando se separa un poco y cuando intento respirar ataca de nuevo entrando a mi boca de inmediato cuando tiene la oportunidad. Vuelvo a separarme y muerdo su labio inferior sin dejar de mirar sus ojos. Hay deseo al igual que lo siento en los míos. Quiero seguir y parece que él siente lo mismo.

Me toma de la cintura y de un movimiento hábil me coloca contra la pared de hornos colocando una pierna entre las mías sin dejar de besarme, sólo se intensifica. Recorre cada centímetro de mi boca con su lengua, y sin querer, un gemido ahogado escapa de mi boca lo cual parece encenderlo aún más escuchándolo soltar un gruñido que pone a temblar mis piernas.

Dulce, todos estos besos saben dulces como el primer día que nos conocimos.

Siento el corazón a tope como si quisiera salirse en cualquier momento de mi pecho y el revoltijo de emociones que hay en mi estómago es indescriptible pero se siente bien. Siento mis orejas calientes y cuando mis manos bajan un poco a su rostro siento las suyas igual o peor que las mías.

Ambos nos separamos para tomar aire y varios pensamientos impuros vienen a mí cuando noto el fino hilo de saliva que hay entre nuestros labios cuando se separan mientras nos miramos con ese deseo en los ojos de seguir con esto.

¿A esto se refería a que si podía con él?, porque lo hace demasiado bien.

—Marshall... —susurro su nombre cuando se baja besando mi mentón hasta llegar a mi cuello y cierro los ojos cuando lame cerca de mi clavícula—. Marshall..., ¿A esto te referías con poder contigo? —ahogo un jadeo cuando besa mi tráquea y cuando abro los ojos lo tengo inclinado frente a mí quedando su rostro con el mío. Sí que es alto.