❄Capítulo 15❄

1.4K 183 5
                                    


—Creo que no escuché. ¿Podría decirlo de nuevo?

—¿Cree que funcionará ese truco?

—¡No!

A pesar de la fuerte respuesta de Shuell, Rayglen solo miró hacia adelante en silencio. Para ser precisos, estaba medio acostado en la silla, mirando a Railda, quien los observaba como un espectador.

Railda los observaba con ojos juguetones, como si hubiera vivido una larga vida aburrida y estuviera viendo algo interesante.

—Barón.

La voz de Rayglen cortó la atmósfera.

—S-Sí, Su Alteza.

—No es un matrimonio para la unión de familias. Netri no estará involucrado en la subyugación en absoluto, por lo que es mejor dejar de lado las expectativas innecesarias.

Con esas duras palabras se trazó una firme línea entre las dos familias que desde un principio no eran amistosas. Entonces, si no es por una unión familiar, ¿cuál era la razón? No había forma de que Rayglen se casara por amor.

Las dudas surgieron, pero primero el Barón Arthur se apresuró a presentar una disculpa.

—Se-Señorita Shuell, me disculpo. No estuve en la capital, así que esta es la primera vez que conozco a una señorita perteneciente a una prestigiosa familia de la que solo escuché hablar...

—Está bien. No hay forma de que las noticias del Sur lleguen tan lejos.

Viendo que se trataba de una persona que nunca había sido mencionada en la novela original, parecía que no se involucraba en los asuntos de la capital.

«Gracias a él, escuché la voz de Rayglen pronunciando mi nombre.»

Shuell agonizó pensando en cómo volver a escuchar su nombre siendo pronunciado por Rayglen.

Mientras tanto, Railda, que seguía observando la situación en silencio, intervino de repente.

—Parece que no ha sido secuestrada. Aún no han tenido una ceremonia de boda, ¿verdad?

—Debe ser porque en estos días, los movimientos de los monstruos son inusuales —respondió el Marqués Cetron.

—¿No es difícil obtener ayuda de otros territorios en la situación actual? En- —preguntó el Barón Arthur, tal vez queriendo enmendar su error anterior.

—Por supuesto. No hay forma de que otros puedan hacer lo que el Gran Duque no pudo —interrumpió Railda.

En respuesta, el Marqués Cetron corrigió en voz baja.

—Muchos temen la abrumadora habilidad de la espada y el poder de la familia Brent, por lo que varias familias deben pensar que es mejor su débil estado actual.

—¿En serio? —preguntó Shuell.

—Oh, querida, esta debe ser la primera vez que escucha sobre esto.

Tal vez pensando que la había ofendido, el Marqués se secó las gotas de sudor de la frente con un pañuelo.

—¿Puede escribir quienes?

—¿Q-Qué quiere decir?

—Bueno, ya sabe. Una lista, una lista de esas familias —susurró Shuell mientras guiñaba un ojo—. Mantendré en secreto lo que me diga el Marqués. Me silenciaré a mí misma...

Shuell levantó el pulgar y lo pasó por su cuello al mismo tiempo que sus ojos dorados brillaban.

Al parecer era una señorita brillante y que eran mentira los rumores sobre que era el perro rabioso de la familia Netri.

La villana cautiva al Gran DuqueWhere stories live. Discover now