❄Capítulo 2❄

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Según la novela original, cuando la espada de Elina la atravesó, una flor floreció del cuerpo de Shuell. De hecho, esto se debió a que tenía la habilidad de la curación en lugar del manejo de la espada... podía revivir flores marchitas y darles nuevos atributos o propiedades.

Revivir flores marchitas y darles nuevos atributos era la "espada" que podía usar. Sin embargo, no se supo de este hecho hasta que murió.

La familia estaba tan obsesionada con la habilidad de la esgrima que ni siquiera le dieron la oportunidad de intentar mostrar otras habilidades. Por eso, la muerte de Shuell solo sirve para darle una amarga lección a la familia Netri.

Cuando recordó los sucesos, la Shuell actual no tenía intención de ir inmediatamente al Norte. A pesar de que deseaba correr hacia su favorito, necesitaba tiempo para adaptarse al mundo desconocido en el que se encontraba.

—Viendo que todavía no hay una bandera de Caballería en el salón, parece que me encuentro un tiempo antes de que Elina sea nombrada Comandante de la Caballería Imperial...

Entonces, eso significaba que faltaba cerca de un año antes de que muriera Rayglen.

—Si logro conectarlos bien, Rayglen y yo podremos vivir.

De hecho, algunos lectores deseaban que Rayglen estuviera junto a Elina y no con Silcaro, el protagonista masculino.

El único momento en que Rayglen pudo sentir emociones fue después de conocer a Elina, así que Shuell pensó que sería bueno si ella cambiara de opinión, pero tuvo que renunciar a esa idea después de tres días.

Como si fuera costumbre, todos los días llegaban cartas acusando a Shuell por acosar a Elina o tratar de matarla.

Después de todo, acosaba a todos aquellos que fueran cercanos a Elina e incluso en algunos casos la suplantó para cometer fraude y así arruinar su reputación. Por supuesto, todas esas fueron acciones de la Shuell original.

Un día, cuando vio las flores del jardín bien cuidadas, cortó unas cuantas y las acomodó en un jarrón.

—No puedo creer que pierdas el tiempo de esta forma.

*Crash*

El jarrón que había arreglado Shuell se hizo añicos en el suelo de mármol, y cuando levantó la cabeza, la fría mirada del Duque Netri estaba sobre su rostro.

—No te basta con no tener habilidad con la espada, sino que incluso manchas el honor de la familia. Eres una deshonra.

*Shak. Shak*

El Duque Netri pisoteó las flores.

Shuell miró en silencio las rosas siendo aplastadas y, como impulsada por el instinto, miró sus manos.

Por entre sus dedos, observó los pétalos rojos flotando sobre el agua del florero roto. Al final del agua esparcida, había una bota de cuero.

De repente, se escuchó la voz de la dueña del zapato.

—No seas demasiado duro con mi hermana, padre.

La voz era tan suave y hermosa que aclaraba los oídos con solo escucharla.

Los labios de la chica, cuyo cabello rojizo estaba recogido en una cola sobre su uniforme blanco de Comandante de Caballería, se elevaron formando una sonrisa.

—De todos modos, no es capaz de empuñar una espada. Es inútil.

Los ojos de la chica estaban llenos de arrogancia.

A pesar del aparente desprecio de la hermana menor, el Duque Netri la trató y miró con dulzura.

—Sí, Elina. ¿Tuviste un buen momento en la comida Imperial?

—Parece que Su Majestad pronto mandará una recompensa por derrotar a los rebeldes. Le envía saludos a mi padre.

Elina sonrió levemente y le entregó al Duque Netri la bandera que indicaba que se había convertido en la Comandante de los Caballeros Imperiales.

Claramente el Duque se emocionó cuando recibió la prestigiosa bandera.

—Eres la salvadora de la familia. Por otra parte, tu inútil hermana solo se dedica a recoger flores.

La mirada feroz del Duque Netri se deslizó hacia el rostro de Shuell.

Las doncellas, que se miraban entre sí, se movieron sigilosamente para retirar los fragmentos del jarrón roto. Mientras tanto, la temblorosa mirada de Shuell estaba fija en la bandera entregada por Elina.

No quería creerlo, pero esa bandera de Caballería Imperial pronto sería la que se colgaría en el salón principal. En pocas palabras, esto señalaba el comienzo de la novela original.

Al ritmo actual, Rayglen y ella morirían en un año.

Quería resolver de algún modo la brecha emocional con ellos, pero al parecer era demasiado tarde para cambiar una relación ya torcida. Entonces, llegados a este punto, solo había una solución.

«Cortaré todos los lazos y empezaré de nuevo.»

—Entiendo, padre. Me iré de casa —dijo Shuell con mirada sombría.

—¿Qué?

En respuesta a la pregunta del Duque Netri, Shuell respondió con decisión y firmeza.

—Me iré. De todos modos, ni siquiera puedo manifestar la habilidad. Por favor, considéreme como una hija desaparecida.

El silencio se apoderó del interior de la residencia del Duque Netri.

*Tap.Tap*

A cada paso que daba, las miradas la seguían.

Shuell pasó junto al Duque y agarró el pomo de la puerta de la mansión.

—Detente.

Cuando repentinamente escuchó la voz del Duque, Shuell se detuvo por un momento, pero no mostró ninguna vacilación al mirar atrás y, por el contrario, parecía un poco emocionada.

—Si das un paso más, ya no te consideraré mi hija. Estás abandonando esta familia, ¿verdad?

—Sí, por favor, excomúlgueme —respondió Shuell con firmeza.


La villana cautiva al Gran DuqueWhere stories live. Discover now