Castelul Purității

Fuera de foco

Beth miro por la ventana una vez más, tal vez lo que había hecho no estaba bien, pero era lo correcto, no había forma en que hacer lo correcto dañara a las personas...

Eso pensaba

Habían pasado ya varios días desde la muerte de Joseph pero su calor aún podía sentirse en su almohada, su olor aún inundaba su habitación, Ivanna había sido abandonada por muchos hombres, empezando por el padre de Nigel, ella también había dejado a muchos otros, lamentando  sus ausencias un tiempo pero superandolo, porque a final de cuentas la vida siempre seguía su curso, sin embargo era ahora la primera vez que se encontraba sufriendo del luto, un dolor nuevo y devastador que se sentía como morir a cada paso,

Termino de maquillarse frente al espejo y se dispuso a salir a trabajar, su jefe le había dicho que  no era necesario, que podía darle unos días más de descanso para que se recompusiera, pero Ivanna sabía que eso no le serviría de nada, ella era una mujer que ocupaba su mente en el trabajo para olvidar sus penas, salió de la habitación y al mirar hacia el pasillo su respiración se detuvo al ver a Joseph

- buenos días, Ivanna -

No, no era él, era Adam, Adam se parecía a Joseph, pero más joven, delgado y con el cabello castaño en lugar de negro, sus ojos también eran diferentes, pues donde había sabiduría en los de Joseph,  los de Adam aún tenían inocencia

- buenos días, Adam - saludo - ¿quieres que te prepare algo para desayunar ? -

Adam negó con la cabeza, mostrando que el ya se había preparado un sándwich para llevar, Ivanna sonrió con dulzura, ese niño era todo lo que le quedaba de Joseph en el mundo, a diferencia de ella que aun tenia a su hijo y próximamente una nuera y nieto, Adam se habia quedado completamente solo en el mundo, sentía que tenía que protegerlo a toda costa de cualquier mal

Por Joseph...

Ivanna se acercó a Adam y lo abrazo fuertemente, haciendo que el chico se tensara, ella se separo después de unos segundos

- Adam, quiero que sepas que estamos juntos en este dolor, si un día necesitas hablar de cualquier cosa, yo estaré ahí  -

- gracias...supongo-

Ivanna sonrió de forma maternal y le dio un beso en la frente,  se despidió de él  y bajo para salir de la casa, al abrir la puerta y mirar al tapete se encontró con un sobre en su tapete que tenía su nombre, lo tomó y guardo en su bolso para leerlo después, ahora tenía mucha prisa

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Gabi termino de rendirse, se quito los pantalones que obviamente ya no le cerraban y los tiro sobre la cama, optando mejor por ponerse un vestido azul ese día, termino de maquillarse y salió al comedor para desayunar

- buenos días cachorrita ¿como amanecistes? - pregunto Viktor mientras le daba un beso en la frente y le dejaba su desayuno en en la mesa

- bien papi, mmm huele...-

- prepare jugo de piña y tu omelette favorito, disfrútalo -

Antes de que Gabi pudiera responder se cubrió la boca con la mano y salió corriendo al baño, presa de unas nauseas horribles, al parecer esa mañana desayunaria otra vez su insípido cereal de fibra, al salir del departamento se dio cuenta como las vecinas chismosas la miraban de reojo mientras fingían barrer las banquetas, no sabía quién había sido, pero al parecer alguien la vio en la sala del obstetricia el día de su cita, ahora toda esta gente metiche sabía que estaba embarazada para su pesar, ignorandolas fue a la parada del autobús a esperar su transporte, hacia ya semanas que Nigel no pasaba por ella, no es que estuvieran peleados o algo, simplemente tanto ella cómo él querían sentir que tenían un poco de espacio antes de su inevitable boda, el viaje a Rumania y la llegada del bebé, todo parecía que iba a ser tan aprisa que necesitaban respirar antes de ahogarse por completo...