El Pirata Embarazado | Lawlu

2 - Confianza.

Mediante pasaban los días, Luffy se pegaba más a Law.
No podía ocultar para nada sus sentimientos hacia el otro Capitán, quien ya también se había percatado de ellos.
Pero no sabía qué hacer al respecto; ese chico que solía usar un sombrero de paja, lo estaba volviendo loco.

Luffy inclusive llegó a sentarse sin problema sobre sus piernas, como si fueran una pareja.
Evidentemente Law siempre lo quitaba, ya que lo ponía demasiado nervioso.
No quería llegar a excitarse con algo como eso y menos al frente de todos.

— Law, esa debería ser Dressrosa. El Log Pose apunta allí.

— En efecto, Nami-ya. Llegamos.

Desembarcaron allí, entre las rocas de la meseta para mantenerse ocultos.
Cuando estaba explicando el plan, varias de las personas con los que estaban desaparecieron, incluído Luffy. Aquello hizo molestar bastante a Law, ya que en parte habían arruinado el plan.

« Tranquilo, Law... No te dejes llevar. »

Relajandose, de todas maneras decidió seguir adelante.
De forma encubierta, se adentró sigilosamente en la cuidad junto a Robin y Usopp. También llevaba con el a Caesar, para entregarlo como había acordado con Doflamingo.
Mientras simulaban ser turistas, tomaron un café para poder conseguir información.

— Y? Cuándo van a dar el siguiente paso?

— De qué hablas?

Usopp lo miraba pícaro, tomando un sorbo de café de su taza. Robin también soltó una risita, entendiendo a la perfección a lo que se refería.

— Ya sabes de lo que hablo, Law. Cuándo vas a pedirle a Luffy que sea tu novio?

— Creí dejar en claro lo que pienso al respecto.

Respondió de forma fría y cortante, evitando el tema por completo.
Ni él mismo sabía qué hacer al respecto.

— Torao-kun. Vimos como le diste un beso... Vas a dejar todo así? Lo vas a seguir ilusionando? Eso es muy cruel.

Aquel tatuado se sorprendió por aquello, apareciendo un sonrojo en sus mejillas que inmediatamente intentó tapar con su ropa y su mano en su rostro, soltando un gran suspiro.

— Por qué insisten tanto con ésto? Ni siquiera me conocen lo suficiente como para confiar en mi a ese punto.

— Sabemos que ambos están enamorados, Law. No necesitamos más motivos que esos... Además, nadie puede hacer cambiar de opinión a Luffy. Si te ama, pues así va a ser.

Antes de que pudieran seguir con su conversación, la cual Caesar escuchaba sin decir nada y con un rostro de “no entiendo nada”, apareció CP0.

En completo silencio, intentaron pasar desapercibidos, cosa que lograron con éxito. Robin más que nadie debía proteger su identidad.
Después de eso, lograron conseguir la información que querían.

— Bien, en marcha. No hay tiempo que perder.

Con algunos obstáculos de por medio, lograron llegar a Green Bit a través del puente, donde Law ya había acordado entregarle a Caesar a Doflamingo.
Allí todo su plan se complicó, siendo completamente engañado por él.
Tenía una carta bajo la manga que no se esperó por nada del mundo.

— Maldito sea... Sabía que algo tenía escondido.

Sabía que no debía confiar demasiado en su palabra, pero jamás en la vida se habría imaginado que él junto a Corazón eran Tenryuubitos.
Ahora entendía, después de tantos años, porqué aquel rubio le dijo que se alejara de Doflamingo.

Fue una intensa pelea contra él y Fujitora, quien intervino pero a favor del rubio.
Con su fruta de Gravedad, lo tenía inmóvil en el suelo. La presión lo hacía jadear y quejarse del dolor.