Escribí mi propia carta muchas veces.
Despidiéndome, agradeciendo, pidiendo perdón.
Nunca funcionó, me acobardé, salió mal, me "ayudaron".
¿Realmente me ayudaron? ¿O simplemente tenían miedo de culparse a sí mismos?
Mis pensamientos van a mil por hora.
¿Con qué y cómo deberia hacerlo? ¿Funcionará? ¿Dolerá?
Llevo así bastantes años, recayendo siempre en lo mismo.
Pasa el tiempo y las ganas aumentan, quiero desaparecer, dejar de sufrir.
Once años tenía y pensé en eso, si, en el suicidio.
Ahora tengo dieciocho, y sigo pensando en lo mismo, ¿Por qué? ¿Hasta cuándo?
Cortes, pastillas, edificios altos, sogas alrededor de mi cuello. Pensé en todo eso y más, pero jamás tuve la valentia de hacerlo.
¿Soy valiente o cobarde? ¿Valiente por seguir a pesar de todo o cobarde por querer terminar con todo?
