—Esto es una locura—Le reclama un brujo de aspecto deteriorado a la secretaria—¿Cuándo se volvió ilegal sacrificar a tres humanos al mes? Son para propósitos medicinales.

Algunos brujos voltean a vernos, brujos de mi Alianza, que al reconocerme hace una reverencia, a lo que yo respondo con una sonrisa. Nara se encuentra en todos lados, en pinturas y estatuas que se mueven, saludando a su gente.

Nik se detiene en la fuente de agua, mirando a una de sus esculturas, parece mirarlo fijamente con una sonrisa. Era de la época en donde aún no había rejuvenecido hasta parecer una adolescente. Sus ojos se empañan un poco y un malestar se instala en mi pecho siento un poco de culpa.

—Es impresionante como todos la adoran hasta el día de hoy, Nik—Dice Cyprian. —Debes estar orgulloso.

—Sí.—Susurra.

Nos acercamos al salón, donde nuevamente nos recitaron las reglas y que teníamos una hora y cincuenta minutos para estar aquí o moriríamos, y nos pidieron que nos sentáramos a esperar.

—Muy bien, Cyprian. —Empieza Nik. —No le faltes el respeto a Jonh, no caigas en sus provocaciones, no insinúes nada....

Se sienta a mi lado un hombre muy pequeño ¿Un duende? Su cara era arrugada y su ropa era hecha de materiales de la naturaleza, como un chaleco de corteza de árbol.

Creí que estaban extintos.

—¿Qué miras, grandota?—Dijo él, de forma agresiva.

—A tí ¿Qué no es obvio?—Respondí.

Nik me jala del saco para que deje de mirarlo.

— Respétalo, no es de ningún circo—Me susurra al oído. —Es de los pocos que quedan, viven aquí y un solo de su cabello vale más que el castillo, además este es un gruñón.

—Y tenemos buen oído, Nikolas—Dijo el duende, se fija en Cyprian —¿Así que este niño será el que hará el intento reemplazar a mi reina Nara?

—Esa es mi intención, señor—Respondió Cyprian con respeto.

—¿Y está quién es?—Le pregunta a Nikolas, apuntándome con su puntiagudo dedo.

—Es la Alfa Suprema de la Alianza Triple Diosa, Regory, la que fundó mi abuela para los sin magia.

Me da una mirada despectiva, y yo sinceramente seguía en shock de que todavía existieran, según los historiadores de la alianza, los vampiros los cazaron hace más de trescientos años porque su sangre era la más deliciosa.

—Pues no parece que pueda ser alfa—Suelta sin meditarlo. —Quizás es una tonta gigante y no lo notaron

Se me quitó la sorpresa, y fruncí el ceño, enojada.

—¿Qué dijiste, enano de mierda?—Escupí.

—Y sorda también, definitivamente es una gigante.

—Zept Regaulth es su turno—Llama una bruja.

—Vamos—Nik me da un jalón para que avanzara. —No puedo creer que te pusieras a pelear con una reliquia del mundo mágico, Jessica, no tienes el derecho de hacer eso si no eres una bruja al menos.

Pasamos al gran salón, las similitudes con un juzgado humano son muchas, sin embargo, el acusado debe estar de pie en medio de la sala, siendo vigilado por brujos a los extremos del lugar.

En el estrado se encontraba los seis brujos más viejos después de Nara. Al medio, estaba John Magnios. Tomo asiento junto Nik en la primera fila.

—Le debo aclarar, Jessica, que aquí usted no tiene voz ni voto —Dice John con un tono áspero.

Sword Onyx [3]Where stories live. Discover now