El amor es difícil, más si tienes dos seres debatiendo en tu interior, en el ya intrincado amor se suma un lobo celoso y predefinido en tu interior buscando desesperadamente a su otra mitad; un mundo donde las castas lo son todo, los alfas y omegas...
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Las personas suelen decir que si haces algo indebido, la conciencia ter carcome después, pero ese no era el caso de la pareja que descansaba en la cama.
Taehyung no podía ocultar su sonrojo y sus mejillas lo delataban, pero lo más vergonzoso era tener los dedos del alfa “limpiando su entrada” para poder retirar su semen, porque no se habían cuidado y más de tres veces el omega obtuvo el preciado, doloroso y delirante nudo del contrario en su interior.
—¿Podrías retirarlo? —preguntó Taehyung—. No me estás ayudando, tomaré una ducha en unos minutos así que no hay necesidad.
—¿Sabes lo que pasa cuando un alfa anuda y eyacula? —Jungkook apoyó su frente en la espalda del menor—. No creas que es fácil para mí, ahora mismo estoy duro.
El azabache sonrió cuando apreció las orejas del menor todas rojas.
—Lo sé, pero dijiste que serías cuidadoso, así que supongo que usaste esa cosa... Ya sabes ¿preservativo extra ligero? —Taehyung se alejó y giró a ver al alfa porque detuvo sus movimientos—. Jimin dijo que los extra finos se sienten igual a que no lo tuvieras.
—Tae —llamó suave el alfa acomodándose en el respaldo de la cama—. Nosotros tuvimos sexo sin protección, anudé en ti, así que hay una alta compatibilidad de que pudieras quedar en cinta.
—¿Qué? —Taehyung no dudó en salir de la cama, sentía como sus latidos iban en incremento por tal idea—. M-Mi padre nos va a matar, más a mí que a ti si se entera de eso.
—Tenemos que decírselo, porque no solo es eso —Jungkook desvío la mirada.
Su primera vez con Taehyung desencadenó su celo, el placer y excitación no solo lo llevaron a anudarlo, el alfa había marcado al omega. No era una marca definitiva, pero al fin de cuentas era una y sumado a ello, estaban enlazados.
—¿Acaso hay más? —Taehyung mordió sus labios.
—Eres un omega marcado, estamos enlazados y vinculados —Jungkook soltó un suspiro largo.
Al mirar a su pareja, pudo notar que era muy probable que comenzara a recriminar y a culparse por lo que hicieron.
—Quiero que sepas que yo no me arrepiento de lo que hicimos —habló Jungkook ante el silencio que se había formado—. No quiero que te culpes o recrimines, ambos lo disfrutamos y estuvimos de acuerdo, ¿no?
—Sí, pero esto es una locura mire por donde lo mire.
Las feromonas del omega se estaban volviendo ácidas debido a la preocupación y estrés por lo que el azabache no dudó en abrazarlo.
—Si lo que te preocupa es la marca, eso desaparecerá en unos días, no es permanente todavía, pero si la rechazas, se convertirá en una marca fea y tendrás que estar en el hospital con medicamentos. Yo no quiero que nada malo te pase —confesó el alfa abrazando de manera posesiva al omega.
