Capítulo 2O

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Con el estómago revuelto, Lisa esperó a Taeyeon en una oficina trasera del estudio de lujo donde acababa de completar su primera entrevista. Había ido bien, por lo que ella podía ver. Seulgi le había demostrado la preparación de un set y luego le pidió que recreara uno por su propia cuenta.

Después de completar con éxito esa tarea y dibujar sonrisas tanto en Taeyeon como en Seulgi cuando se maravillaron con sus esfuerzos, Seulgi la puso con un joven y le pidió que lo fotografiaran en una variedad de conceptos diferentes. Gracias a Dios por la necesidad exigente y selectiva de Minnie de que cada tipo de foto que le tirara tenía que ser diferente desde cada ángulo, porque Lisa estaba segura de que solo gracias a ella, lo habia logrado.

Y pensar que había estado a punto de llamar para cancelar.

Después de su conversación con Jennie la noche anterior, la idea de someterse a las críticas y arriesgarse a fracasar le había resultado espectacularmente poco atractiva. Pero era cierto lo que le había dicho a Jennie, quería fotografiar. Sería una idiotez desperdiciar una oportunidad honesta de convertir su pasión en una carrera. Así que esta mañana se había levantado, había llorado en la ducha y luego se había dado una larga charla de ánimo antes de conducir hasta la dirección que Taeyeon le había dado, dispuesta a hacer lo que fuera necesario para impresionarles.

Esperaba que hubiera funcionado.

Taeyeon entró en la oficina con una amplia sonrisa. — Así que tienes buen ojo para el arte, Lalisa.

Tímida ante los elogios entusiastas, Lisa se esforzó por hacer contacto visual.

— Gracias.

— Dicho esto, me gustaría hablar contigo sobre venir a fotografiar para mí — Taeyeon se sentó en su silla de oficina de cuero, suspirando mientras ponía los pies sobre su escritorio. — Pero primero, vamos a discutir el salario, porque sospecho que puede ser un posible factor decisivo.

Lisa parpadeó, asombrada por la ligereza con la que Taeyeon le había ofrecido el trabajo.

— Espera, ¿así de fácil?

— Qué quieres decir? — Cruzando los brazos sobre el pecho, Taeyeon inclinó la cabeza con evidente diversión. — Hiciste bien la entrevista. La semana pasada trajimos a otro candidato con tres años de experiencia en fotografía y no lo hizo ni la mitad de bien que tú. Aparte del hecho de que estoy encantada de poder ayudarte a hacer este cambio, te mereces una oportunidad. Estoy en condiciones de dártela.

La barbilla de Lisa temblaba. Estaba abrumada por la emoción, incapaz de responder. Ni en sus sueños más salvajes había esperado que el día de hoy saliera tan bien.

No sabía qué hacer a continuación, así que se concentró en contener las lágrimas que amenazaban con escaparse. — El salario es irrelevante. No es como si tuviera alguna experiencia, de todos modos.

Taeyeon enarcó una ceja. — Puede que cambies de opinión cuando te dé una cifra.

Lisa negó con la cabeza. — He ganado mucho dinero durante varios años. Lo único que he hecho es meterlo en el banco. — Su corazón retumbó al darse cuenta de que realmente iba a hacerlo. Iba a cambiar su vida. — Créeme, el salario no es un factor decisivo. Ni siquiera importa.

— ¿Eso significa que aceptas?

Casi paralizada por una insoportable ola de duda, Lisa apenas consiguió mirar a Taeyeon a los ojos. — Nunca he trabajado en un estudio. No estoy segura de saber qué hacer.

— Aprenderás — La expresión de Taeyeon se suavizó. — Y tienes que empezar por alguna parte, ¿verdad?

Lisa asintió. Su miedo retrocedía a medida que la anticipación se apoderaba de ella. — ¿Cuándo quieres que empiece?

lascivia | jenlisaWhere stories live. Discover now