130

523 17 2
                                    

FINAL PARTE I

Jade Cordovero:

Pasaron demasiadas cosas a mis cortos dieciséis años.

Tengo un nudo en la garganta, jamás supe que le pasó a mi padrino Mauro para que nos dejara de la noche a la mañana, sufrí demasiado y sigo sin superarlo. Ya pasaron tres años desde que se fue, desde que me dejó.

Era el único que me entendía, el único que jamás me crítico cuando yo le contaba mis cosas y fue el único que me acompañaba aún cuando lo único que yo quería era estar sola. Le dejé miles de mensajes preguntándole cuando va a volver y le empecé a contar mi vida sin importar que él no me contestará.

Los primeros cinco meses me dejaba en visto, escribía y borraba, así sucesivamente hasta que un día no lo hizo más. Quizá seguía viendo mis mensajes y solamente desactivo el visto.

Siempre pensé que el chico por el cuál me enamoraría iba a ser la persona que más me rompería el corazón y resultó que fue Mauro, mi padrino.

También tengo a mi otro padrino Ivo, que a veces me hace reír pero no tanto como lo hacía Mauro, con él lloraba de la risa y con Ivo nunca.

Suspiré y apague mi celular, saque un cigarrillo del bolsillo junto al encendedor y lo prendí. Me acosté en el techo para mirar el cielo como lo hacía con Mauro, recordé la última vez que nos subimos acá.

Flashback:

Lit:Boluda, me voy a cortar los huevos.

-.Por? Embarazaste a una? *sonreí*

Lit:Ni a palo, digo eso porque te hice re mañosa y desde que te enseñe a subirte al techo te subís todo el tiempo y tus viejos me van a matar si se enteran. *reí*

Puse mi cabeza en su pecho y ambos nos mirábamos.

-.Te amo padrino.

Su reacción fue sorprenderse, jamás le dije te amo a nadie, es el primero al que se lo digo.

Me abrazó y empezó a dejarme besos en toda mi cara logrando que yo me queje haciéndolo reír.

Fin del Flashback:

Saque mis lágrimas y suspiré, apague rápido el cigarro al escuchar que subía alguien.

Vi que subió Mateo, rodee los ojos y me senté. Apague el cigarrillo al pedo.

Trueno:Acá estás roñosa, te estuve buscando por todos lados. Quién te enseñó a subirte al techo? *sonríe*

Sentí una punzada en mi pecho y me levanté.

-.Me enseñó Mauro pero vos no cuentes nada.

Subió y se sentó al lado mío.

Trueno:Lo extrañas, no?

-.Siempre.

Sentí como ese nudo en la garganta volvía.

Trueno:Ya te dijimos que va a volver igual.

-.Pero cuando? Hace años que se fue, sin explicarme nada. Miles de mensajes le mandé y no me contestó ni uno, es un egoísta de mierda.

Trueno:Jade...

Baje lo más rápido que pude, sentí como mi corazón se rompía un poco más. No entiendo porqué me dejó y me enoja no entenderlo.

Yendo para mi cuarto, me cruce a papá que me miraba sonriendo hasta que me vio llorar.

Corrí hasta mi cuarto, cerré de un portazo y me tiré en mi cama a llorar.

Seven:¡Mateo!

Era obvio, habían acordado que a Mauro no lo pueden nombrar en mi presencia porque es el único motivo por el cuál lloro en frente de ellos.
Ni cuando murió el perrito Kobye llore y eso que se me partía el alma pero no quería demostrarselo a ellos.

(...)

Me desperté y vi que ya era de día. Agarre una muda de ropa y me entre a bañar, apenas termine me cepille los dientes y me hice mi skincare.

Baje a desayunar y estaban todos en la mesa comiendo y hablaban de cosas random hasta que me vieron.

Me senté al lado de mi madrina, Nicki. Somos súper unidas pero no tanto como lo era con Mauro. Ella junto a Cazzu me estuvieron acompañando y me trataban de llevar de compras, digo "trataban" porque casi nunca accedía, realmente no quiero ir de compras porque soy muy insegura y uso la ropa que Mauro dejó.

Ni siquiera su propia ropa se llevó pero eso no me importo mucho, la uso junto a su perfume para no extrañarlo tanto. Lo sé, soy una masoquista de mierda.

Seven:Jade, que opinas si viajamos a Buenos Aires?

Todos me miraron un poco sonrientes y deje de comer, aclare mi garganta y me acomode en mi asiento.

-.No me gusta Buenos Aires pero si ustedes quieren, los acompaño.

Ailen:Nos gustaría que hagas lo que vos quieras, al final tenés dieciséis años.

Wow:Sí, pero mandarse sola no puede. Si ella no viaja, yo tampoco.

Dani:Bueno, menos plata para gastar *ríen*

Mire a Wos, él y yo casi nunca hablamos, por qué se quiere quedar conmigo?

Seven:Nos vamos a ir en la semana, el motivo por el cual viajamos es porque Jacob quiere conocer la capital de Argentina, ya sabes cómo es.

Rodee los ojos y seguí comiendo. Jacob es como el boludito de Ecko, no me banco a ninguno de los dos.

Hablando de Roma, justo bajo y se acercó a darme un beso en el cachete, enseguida me limpie y lo mire mal.

Vi como mi papá le hizo señas y sin decir nada, se fue a sentar. Miraba mi plato y jugaba con este mientras todos hablaban.

Dani:Joa, dijo Mauro que en estos días nos viene a visitar.

Levanté mi cabeza, sentí como mi corazón empezaba a latir a gran velocidad y mi papá estaba totalmente serio.

Seven:Te referís a Duki, no?

Dani:Pff, obvio.

Sonreí, Daniel no sabe mentir pero raramente mi papá le cree.

Me di cuenta que mi celular quedó arriba, me levanté con el permiso de mis papás y corrí hacia mi cuarto, agarre mi celular y sentía que mi corazón estaba por explotar de lo tanto que latía.

No sé ni cómo terminar esta novela pero hey, narro Jade.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 27, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

365 Días (Seven Kayne)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora