Los tripulantes solo se dieron cuenta de que huyo cuando uno a lo lejos le avisto, porque incluso el sonido de las olas camuflo los ruidos que hizo al huir.


Joshua sabia que ahora se venia la parte más difícil, ya que no sabia bien en que dirección irse y cuanto tiempo le tomaría llegar a tierra, siendo sus suministros limitados, por lo que de momento iba a controlar bastante sus recursos.


De esa forma empezó a naufragar en un turbulento mar, estando al borde de caerse a esas aguas varias veces, por lo que por horas tuvo que estar muy pendiente a no volcar con el bote, sujetándose de su saco como si su vida dependiera de ello, hasta que al fin las olas se calmaron y solo se tuvo que enfrentar a la incertidumbre de cuando llegaría a tierra firme.


Esa primera noche en altamar cayo dormido acurrucado a sus pertenencias mientras se cubría con una manta robada, la cual por suerte había guardado bien así que no estaba tan húmeda, pasando varias horas de esa forma debido a lo agotado que quedo entre ayudar en el barco y buscar la forma de huir.


Cuando ya despertó es que no sabia bien hacia donde remar, ya que al parecer en la noche la marea lo alejo mucho más al haber ni si quiera una piedra a la vista, así que prefirió dejar que el mar le arrastrara en vez de agotar energías innecesariamente, pero por suerte solo estuvo así un día, ya que al siguiente logro a lo lejos visualizar unas aves, en donde sabia que hacia donde volaban debía haber tierra.


Estuvo remando y remando, bebiendo pequeños tragos de su agua y comiendo muy poco, logrando ir avanzando a donde creía había tierra. Cuando salían los primeros rayos de sol es que intentaba remar lo máximo posible, pero cuando el sol ya estaba en lo más alto es que prefería cubrirse con su manta y tan solo mirar al horizonte buscando algo, limitándose a solo usar los remos para orientar bien la dirección de su bote, para luego en cuanto fuera atardeciendo volver a ponerse a remar y avanzar hasta que anocheciera, en donde ante la intimidante oscuridad tan solo intentaba fijarse si había alguna luz a lo lejos, pero tan solo estaban las lunas y las estrellas guiándole.


Sus días consistieron en eso durante un tiempo, siendo bastante pacifica su rutina ni si quiera llegando a ser aburrida, ya que se distraía intentando pescar de día y de noche identificar las constelaciones.


Eso hasta que llego una noche en donde un clima cálido le permitió acurrucarse feliz entre los tablones de ese bote, descansando profundamente de un largo día en el que trabajo bastante debido a que el clima nublado le permitió remar sin tener que evitar los fuertes rayos de sol, aunque por otro lado lo malo es que una ligera neblina le impedía ver bien al horizonte, tan solo guiándose por unas gaviotas que pasaban de vez en cuando sobre su cabeza.


¿Cuántos días habían pasado? ¿Estaba cerca? No sabia, pero por suerte aun le quedaban varios suministros, razón por la que no había llegado a pasar realmente hambre ni sed. También últimamente las noches no habían sido tan frías, así que había podido dormir mejor y así tener mejor energía al día siguiente.


Por eso cuando despertó ante los primeros rayos de sol es que no se sorprendió de sentirse tan renovado, sin embargo cuando empezó a abrir los ojos noto algo raro, a lo que rápidamente se sentó y noto que el bote no se movía, al contrario, estaba demasiado estático, por lo que confundido miro a su alrededor notando que pasaba.

Naufragio al paraíso (JIHAN/MINSHUA) / ThreeshotHikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin