Cuatro Bué-Schá (fragmentos, parte 1)

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Hoy, han venido. Tres. Su sola presencia embellece aún más el lugar. Su tamaño, aun viendo desde tan lejos que uno no pueda ser sentido ni detectado, es imponente. Dos de ellas, cuando estén erguidas, levantarán su cabeza a casi siete pies desde el suelo. La otra es aún más alta. Están sentadas, algo lejos de la columna. Forman un pequeño círculo.

Dos de ellas, la muy alta y la que se ve más joven entre las tres, visten hermosamente. Usan ropas Kii-Pischká. Sus vestidos son suaves, vaporosos, y calzan sus pies con sandalias que atan a sus pantorrillas. Son ropajes hechos para sus faenas, sencillos. Kii-Pischká caminan, lo hacen mucho. Tienen muchas parcelas, repartidas por todo lo que antes fuera el fondo del Sié, y en las que fuera las tierras del continente, y de la grande isla, Baak-Atá.

Therion llaman Taar-Duk a lo que antes era la isla.

Sus larguísimos cabellos negros están entrelazados en incontables trenzas que agrupan de forma incomprensible en vueltas y vueltas, sujetas con un solo moño que suelen no cambiar en la vida. Las mismas vueltas les cuelgan hasta la cintura. Debe ser pesado de llevar, pero la costumbre las ayuda.

Estas dos, vestidas cómo Kii-Pischká, sin duda alguna son Schi-Nyá. Se adivina en su estatura, más elevada que la de la mayoría, en sus brazos y hombros poderosos, marcados todos los músculos por el entrenamiento largo y constante, dejan saber qué hace mucho que no se dedican a las faenas diarias de Kii-Pischká. Si por no estar ahora sentadas, se pudiera ver sus gemelos en las piernas, se verían inmensos, listos para mover a las fuertes damas que los llevan a dos o, incluso, tres veces la velocidad que podría lograr si no se entrenara. Eso, y el hecho de que sus ropajes no se ven curtidos por el trabajo de conseguir el sustento.

La otra dama es mayor, aunque su rostro no revela mucha más edad que la de las Schi-Nyá. Come con ellas, ríe con ellas. Comparten la chicha en la misma totuma, y es ella quien la sirve de la jícara. Es, sin duda, su Waïá. Una de dos. Su Waky no está.

Ella, es Bué-Schá.

Su cabello negro, suelto y que cuelga hasta debajo de los hombros, se niega a ser llevado por la brisa, cae con peso, poderoso en su cantidad. No es largo cómo el de las Schi-Nyá, para mejorar el balance. Brillante en reflejos blancos por Gloria de Swá de los Cielos. Viste diferente: botas duras, negras, les es difícil aprender a usarlas para caminar, pero protegen toda su extremidad, desde la rodilla. Sus pantalones elásticos, ceñidos pero no apretados, les permiten moverse en toda la extensión de su capacidad. Enloquece adivinar la poderosa musculatura que mueve a la Bué-Schá, detallada fibra a fibra debajo de ese pantalón. No lleva camisa, una pequeña blusa también ceñida al pecho, cuya intensión nunca fue cubrir, sino sostener, y una chaqueta corta abierta, de mangas largas, de un material pesado y resistente, que no debe abrigar, sino amortiguar. Su vestido es del color que las hojuelas de avena suelen tomar.

Y todo eso, es para distraer. Una exteriorización de la arrogancia interna de Bué-Schá.

Están alegres, felices, y esa dicha se les ve en los ojos marrones, un café tan oscuro, que en los momentos de poca luz, o cuando se dilatan sus pupilas, casi se ven negros. Tienen la piel tostada, bronceada en un delicioso color no tan oscuro que refleja todo el poder de Swá de los Cielos. Pero ellas vienen del antiguo continente, que Therion llama Tyje-Moth. Si fueran de aquí, de Taar-Duk, no serían tan altas, aunque si mucho más que los demás Híbridos. Su cabello negro brillaría en tonos azulados en la luz del día, y su piel sería más morena.

Therion Taardukianas son, particularmente, hermosas.

Las que están aquí no son Taardukianas. Cerca de ellas, tienen sus mochilas, dos, muy grandes, para cada una. Aunque en realidad, no tan grandes como las que suelen llevar Kii-Pischká. No acostumbran a tener posesiones que no puedan llevar consigo. Son una raza seminómada, tienen su territorio, pero éste se sobrepone con el de otras tribus, y lo recorren sin afincarse mucho en un solo lugar.

TOU MEGA-THIRIONWhere stories live. Discover now