Oliver", comienza agarrando la mano y se detiene en seco, permitiendo que Kara lo agarre para mantenerlo en su lugar. La súplica esperanzada en sus ojos le permite a Kara.
"Cuando te fuiste, cuando todos creimos que moriste traté mucho de mantenerme unida. Traté de mantener unido al equipo. Traté de enterrar la parte humana de mí que sentía porque me dolía demasiado pensar que no estabas allí. Y extrañé tú."
"Kara..." Oliver pronuncia interrumpiendola.
"Le dije a todos que era porque sabía cuánto significabas para ellos. Y luego me pidieron que considerara lo que significabas para mí." Ella suspira mientras continúa, sintiendo su corazón latir rápido contra su pecho. "Nunca llegué o pude darles una respuesta porque no estoy segura de saberlo. O tal vez me dolía demasiado como para darme cuenta. Pero ahora lo sé". Ella sonrie torpemente. "Tú significas todo para mí. Y no quiero una vida que no te tenga a ti".
Oliver niega con la cabeza. "No volveré a irme a ninguna parte, lo prometo"
"Así que quédate, por favor", comienza Kara, reafirmando su agarre en su mano.
Ambos dejaron escapar un suspiro entrecortado mientras entrelazaban sus dedos. atrayéndola suavemente, pero con una fortaleza que la hizo sentir como si nunca quisiera soltarla.
"No pienso ir a ningún lado" .
Él lleva su mano a la mejilla contraria mientras encuentra sus labios con los de ella. Fue un toque suave que la tomó un poco desprevenida, causando que él se alejara una pulgada después. Sus ojos se encuentran y Kara no pudo evitar perderse en sus ojos azules que de alguna manera tenían tanta vivacidad a pesar de todo lo que habían presenciado.
Y con ese recordatorio movió su barbilla hacia adelante mientras permitía que sus labios se volvieran a conectar, esta vez con fervor. Sintió que sus manos se desplazaban hacia su rostro, Ambos se sumergen en el beso mientras él tira de su cuerpo más cerca de él. Ambos sienten la intimidad y el celo del momento, apretando los labios del otro contra los suyos como si hubieran esperado casi toda una vida por este momento.
Ella siempre estaba dispuesta a dar un salto de fe. De todos los saltos que había dado desde que lo conoció, este era el que más apreciaba: este momento de conexión física y emocional que trasciende los sentimientos que jamás consideró posibles.
Mientras persiste, las manos de Kara caen naturalmente y envuelve sus brazos alrededor de su cuello mientras salta encima de el.
Él comienza a caminar hacia su sofá, sin dejar de abrazarla contra su cuerpo. Él la acuesta suavemente antes de arrojar su chaqueta al suelo a su lado. Rápidamente comienza a desabotonar su camisa antes de dejar que Kara haga los honores. Se quita la camisa mientras Kara se quita la camiseta que llevaba puestó y le da la tarea de desabrochar el sostén.
Luego permiten que sus cuerpos choquen uno contra el otro tal como lo hicieron sus labios una vez más. Se deleitan con el toque de la piel del otro, absorbiendo el calor y permitiéndole vigorizar sus deseos de seguir adelante. Los dedos de Kara recorren las cicatrices en la espalda de Oliver y permite que su mano se siente allí con ternura. ambos sonríen felices, no sólo por la alegría impetuosa que emanaban de la sensación de sus caricias contra piel en todo sus cuerpos. Pero también en el sentimiento de aceptación de que aquellos eran aparte de él.
Su pasado era parte de él pero lo convirtió en heroe. Ese hombre con la que ella se acostó esta noche, y ese era alguien a quien amaba con una pasión que es rara.
