"That Harrow Kid" GEMINIFOURTH

#4

¿Por qué mierda sentía la necesidad de llamarle y preguntarle qué quiso decir en la cafetería? Desde que llegó a su casa no hacía otra cosa más que pensar en ello, por primera vez después de años sentía que podía saber el por qué del repentino odio de Fourth hacia él. ¿Había sido algún concurso? ¿Le había quitado algún trofeo? 

Sabía que no iba a encontrar respuestas si no le preguntaba directamente, pero no se atrevía a buscarlo. La presencia de Fourth lo llenaba de estrés, de impotencia, de desesperación, sentía la maldita necesidad de molestarlo solo para tener un poco de su atención y odiaba eso. Odiaba siempre de alguna manera necesitar de él aún cuando sabía que no se soportaban. No lo entendía y eso lo exasperaba aún más. 

Con pasos pesados se levantó de la cama yendo a su escritorio para abrir uno de los cajones en él y tomar entre sus manos una foto que había guardado durante mucho tiempo, y que muchas veces había estado a punto de quemar. Era una foto de su equipo de fútbol en la secundaria, en ella aparecían Gemini y Fourth al centro de todos, ambos con uno de sus brazos por la espalda del otro, se veían felices, incluso sus rostros lucían diferentes, tan brillantes. Definitivamente muy diferentes a lo que eran ahora. 

Gemini aún recuerda estar en esa clase que compartía con Fourth, era de las pocas en donde ninguno de sus otros amigos estaba, así que siempre se decidían por hacer los trabajos juntos. Recuerda haberlo buscado entre todos sus compañeros esperando a que se sentara a su lado para iniciar la asignación, pero nunca llegó. 

Cuando pudo encontrarlo entre todos, Fourth estaba tomando asiento junto a Love. 

Recuerda cómo sintió un pinchazo en su pecho y un nudo formarse en su garganta, se sentía exagerado por tener esa reacción, y no podía evitar preguntarse por qué tenía que sentirse así si era sólo un amigo. Un amigo el cual había encontrado novia, no podía exigir un lugar que no merecía, no podía seguir esperando que su relación fuera la misma cuando ahora tenía que darle prioridad a ella. 

Cuando los rumores comenzaron a aparecer sabía que ya no había oportunidad, no podía volver a acercarse a Fourth porque ahora él pensaba que era un mal amigo, podía sentir la mirada de decepción y rechazo que le dedicaba cada vez que se lo encontraba en los pasillos de la escuela. No habría manera de que GemFourth, a como les gustaba llamarse, volviera a existir. Ahora tenían que volver a ser extraños. 

Volvió a verlo cuando fue a presentar su ficha de inscripción a la preparatoria y no pudo evitar enfocar sus ojos únicamente en él. Su cabello estaba más largo y ahora había una pequeña cicatriz en su ceja, también parecía haber perdido un poco de peso, pero aún lucía tan radiante como antes, siempre hablando fácilmente con todos luciendo amable. Claro, amabilidad que desapareció en cuanto lo miró de vuelta y ahora esos ojos que parecían brillar como dos estrellas, se llenaron de odio con su sola existencia. 

No podían volver a estar juntos, no cuando tenía el impulso de acercarse y estampar su cuerpo contra la pared y reclamarle por qué mierda no pudo seguir siendo su amigo a pesar de que tuviera novia, por qué no confió en él y creyó esos estúpidos chismes, preguntarle si tan solo lo quería cuando se sentía solo, si había sido divertido hacerse amigo del chico introvertido sabiendo que luego en la primera oportunidad que tuviera lo iba a alejar nuevamente. 

Recuerda haber suspirado con coraje y tirar su papel de inscripción a la basura. No podía hacerlo. Harrow parecía una mejor opción. 

Cuando tuvo su primer partido no esperaba encontrarse a Fourth en el equipo contrario, sabía que le gustaba el fútbol pero no creyó que iba a seguir jugando después de que se había salido del que tenían en la secundaria. No había pensado en qué hacer si lo volvía a encontrar así que una especie de efecto espejo se creó en él cuando notó la manera en que Fourth lo miraba, la manera en que parecía quitarle el balón con tanto odio y cómo lo insultaba cada vez que tenía oportunidad. Iniciando así, una rivalidad que incluso adoptaron sus demás compañeros de equipo contra los otros.