PRÓLOGO

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El timbre que dio fin a la clase se convirtió en esa señal que ella necesitó para levantarse de su sitio sin que nada ni nadie la detuvieran, abriendo la puerta de la clase sin ningún impedimento y, sobretodo, decidida, sin ninguna duda que la hiciera retroceder sobre sus pasos.

Así, Clara García Bécquer le asestó un puñetazo a Tomás Balmaceda en mitad del pasillo, nada más verlo, a la vista de todos. Para aquellos que lo vimos en vivo y en directo, fue como vivir la típica escena de una película estadounidense donde dos personajes se pegaban en el parking del instituto. Pero no estábamos en Estados Unidos, ni mucho menos en un parking de instituto.

Segundos antes de salir Clara de nuestra clase, lo hizo Tomás. Cuando él quiso darse cuenta de que alguien lo seguía, un ser vestido de furia y disfrazado de la chica que normalmente solía pasar de todo y de todos, se abalanzó sobre él y empezó a darle puñetazos en su cara, con una rabia desmesurada y que muchos de nosotros no éramos capaces de comprender. Lo insultaba diciéndole que estaba muerto para ella, que no quería volver a verlo en la vida y que mucho menos iba a pagarle lo que le debía. Los profesores de guardia se echaron también sobre ellos para separarlos, gritando a los cuatro vientos lo inaceptable que era ver tal comportamiento dentro de los pasillos del instituto.

Realmente daba igual donde hubiera sucedido. Expulsarían a Clara dada la situación, fuera o dentro del centro.

Y, claro, luego habría que ver si realmente la echaban. Sus padres no iban a permitir que tal suceso manchara el perfil de su familia perfecta.

Mientras se la llevaban a dirección arrastras, como si la estuvieran llevando a un centro psiquiátrico en contra de su voluntad, no pude parar de pensar en la antigua versión de Clara, aquella que conocí en Hita. Habían pasado unos años, sí, pero tampoco fueron tantos como para que la desconociera, para que la mirara y no encontrara a esa Clara que llamaba la atención por su presencia, fuera donde fuera, y no por haber molido a palos a un chaval que la había cagado.

Tal vez, si yo no la hubiera cagado, nada de esto habría pasando.

Tal vez, Clara volvería a ser feliz.

Si es que alguna vez lo fue.

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⏰ Last updated: Jun 10, 2023 ⏰

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