Capítulo 12 - Parte 2

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Advertencia

Este capítulo en comparación de los demás es un poco subido de tono por contener cierto tipo de tensión, tampoco extrema.


 23 de octubre del 2009


Es la primera vez en años que Henry rema a diferencia de Ellie cuya última vez fue hace 2 años.

Sin contar el equipaje de seguridad, ambos llevaban puesto ropa ligera, teniendo en común shorts jeans. A ambos les convenía por ser esbeltos, aunque Henry es el menos tonificado. ¿Qué se podría esperar de una prófuga del pasado, la misma quien hasta pudo participar en una escalada? Pues esa actividad requiere un esfuerzo físico tirando a intenso.

El ex convicto no dijo nada desde que empezaron a remar por el río Bravo, a un ritmo normal. Nunca admitirá que iba detrás de Ellie por miedo a lo desconocido, pues la velocidad que fluye el río con el paso de los segundos se vuelve inestable además de haber rocas sobresalientes...

¿Cuál miedo a lo desconocido? Estamos hablando del mismo tipo que sin pensar 2 veces saltaría de un helicóptero a gran altura; la diferencia es que uno se acerca más al riesgo de lesionar por chocar en las rocas. Pero lo bueno es que Henry y Ellie saben nadar.

—Trata de no desviarte a los extremos, es menos profundo —le sugirió Ellie concentrada en la trayectoria, aún con sus lentes de sol puestos—. Parece que no hay señal de peces grandes.

—No hay que confiarnos —contestó Henry igual de concentrado, tratando de acomodarse un poco su casco. Echó un vistazo hacia atrás y no había nadie en bote a simple vista.

Ambos esquivaron casi toda roca que obstruía su paso. Pero a medida que avanzaban, la intensidad de la corriente del agua aumentaba. Ellie como tenía más experiencia en remar, le costaba menos esquivarlas. Cuatro minutos después Henry chocó con una mediana roca y eso lo atrasó por lo que empezó a remar más rápido sabiendo que había suficiente espacio.

Se arrepintió tarde ya que un pez de medio metro saltó inesperadamente hacia su rostro dándole un coletazo.

Para mejor disfrute del paisaje, Ellie se quitó los lentes tras haber escuchado «¿Qué demo... ?» de parte del mayor. Volteó a verlo, y le preguntó por lo sucedido.

—Un pez me golpeó con su cola. El guía nunca nos dijo de poder encontrarlos así de grandes —explicó Henry quien separó sus manos una vez alzadas queriendo interpretar el tamaño del pez, y rápidamente volviendo a agarrar el remo, no es necesario decir el por qué.

—Exageras. Digo a que estemos atentos del todo si encontramos mayores de un metro —le respondió Ellie sin parecer desganada—. Hasta ahora no encontré uno de ese tamaño o mayor, y ojalá que no vengan en cardumen... a no ser que tengan reflejos al presentir el impacto de los remos.

No es por tenerle miedo a los peces, sino que sabe que debajo del río obstruyen el movimiento del remo. 

—Ajá. ¿Te acuerdas de mi lema de "no lo pienses, solo hazlo"? —como Henry prácticamente estaba cerca de Ellie, remó cada vez con menos esfuerzo hasta posicionarse al costado suyo bajo la distancia límite que el guía les había advertido.

—Es la primera vez que me lo dices.

—Eso lo apliqué cuando me ofrecí en sacarte de la sala de espera en "The Wall" —una sonrisa se esbozó en el rostro del ex convicto por el recuerdo que tal vez se volvería inolvidable. Incluso se acuerda la fecha exacta: 16 de septiembre.

Triple threat: Más grande, más largo y sin cortesWhere stories live. Discover now