Laura.

1.7K 80 3
                                    

Con Gavi hablamos toda la noche, de como estaba y como se sentia. Llore junto conmigo.
Le conté como me fue en New York y mi experiencia alli.

No pasó nada, nada de besos ni nada.

Cuando nos dió sueño fuimos a dormir. Yo ya estoy acostada en mi cama, viendo mi móvil. En eso veo como abren la puerta.

Es Gavi.

— Hey, Lor... ¿Puedo dormir contigo?

Di una risa, recordé la primera vez que dormimos. Fue así como me pidió Gavi dormir, bueno, esa vez pasaron cosas indebidas pero está vez no pasaran.

— Venga. — di unas palmaditas a la cama, este se dirigió a ella, y se acostó.

— Extrañaba esta cama. — se giro hacia mi. — Te extrañaba.

— Y yo a ti Gavi... — Lo abrazo.

— Hey, Lor...

— Dime.

— ¿Lo nuestro aún no se acaba, verdad? ¿Aún hay un nosotros?

Cómo lo extrañaba.

— Aún hay un nosotros, Pablo. — sonrió.

No sé en qué momento pero nos quedamos dormidos.

Al despertar tengo a Gavi abrazándome de espalda. En eso entra Pedri.

— Hola... — Gavi despertó de golpe y miro a Pedri. — Ay... Como extrañaba esto...

— ¿Que quieres Pedri?

— Decirte que... Se me olvidó.

— ¿En serio?— le pregunto y lo mire mal. — Vete.

— Ah, ya recordé... Emm te ha llegado un correo.

— Ah vale... Dejame en el escritorio.

— Es importa, está el estampado de la universidad aquí en Barcelona.

— ¡Ah! Que bueno. — me levanté rápido y le quite la carta de sus manos. La abrí. — "Me complace informarle que ha sido acepta en la universidad de Barcelona" ¡Aaaah!— grite de la emoción.

— ¿Fuiste aceptada? ¡Fuiste aceptada!— grito Pedri feliz, me abrazo. — Me alegro, Rory.

Salte a la cama donde estaba Gavi con una sonrisa..— Mira— le di la carta.

— ¡Fuiste aceptada! Felicidades mi Lor. — me abrazo.

Después de celebrar unos minutos llegó Poe a la habitación, celebre junto con ella.

Poe está muy distante conmigo, creo que está enojada por haberla dejado aquí, no me podía llevar a New York.

— Venga, Pablo. Tienes entrenamiento. — hice que se levanté, este se levantó pero sin antes gruñir.

— ¿Me puedo duchar aquí?

— Pense que nunca lo preguntarias.— me sonrei.

Quédate [Lorelai y Gavi] Where stories live. Discover now