𓏲 Capítulo Final

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Mi voz quedó atrapada en mi garganta. Tomó un tiempo para que volviera, así que les conté de caminó a clase.

— Por cierto —dijo Sana en el almuerzo—, Kim va por ahí diciendo que la única razón por la que no golpeó a Mina fué porque es la hija de la directora

— Que estúpida — se unió Momo—. Esa chica es una cobarde, obviamente nunca lo admitiría.

— Ella tiene buenas razones para tener miedo, creo que Minari le hubiera ganado la pelea.

Momo apoyó su barbilla en una mano— ¿Entonces, qué vas a hacer con ella?

— No sé, creo que es el nuevo tema de la escuela, todos hablando de ella —miré a Sana, ella siempre estaba más informada por la cantidad de amigos que tenía.

— Oh, sí. Ella es el centro de atención, pero al parecer no deja que nadie se acerque, así que no tienes que preocuparte.

Con una sonrisa miré a ambas — Tengo un plan, me toca a mí hacer un experimento

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Después del almuerzo le pregunté a la directora si podría ir a buscar algo a su casa. Ella dudó, pero le expliqué el punto y lo que estaba pasando. Eso fué lo que hizo que ella me diera la llave de su casa advirtiéndome que volviera pronto.

Llegué a casa de Mina en tiempo record. Entrar a esa casa vacía se sentía extraño y tal vez un poco emocionante. Directamente fui a la habitación de Mina. Si mi objetivo no estaba allí, no sé a dónde más buscar.

La habitación está bastante ordenaba, y pude ver mi objetivo colgado en el armario— Tiempo para la fase dos —murmuré.

Necesitaba habilidades para desbloquear una puerta, por eso mismo Sana es mi única opción. No sé de dónde lo aprendió, pero sin duda es muy útil. Momo por su lado está vigilando el pasillo. Ahora mismo estamos frente a la guarida, no queríamos faltar a clase... Pero, bueno, hay otras cosas más importantes que hacer.

Una parte de mí aún estaba insegura; recordando la noche que Mina me dijo que me quería, pero no quería decírselo a nadie. Quería mantener nuestra relación en secreto. Cuando yo quería lo contrario, no quería ocultar mis sentimientos, mantenernos detrás de las puertas de la guarida.

Ahora, sin embargo, no me importa, si alguien sabe o no. Todo lo que quiero es ella.

Quiero a Mina. Mi Mina.

Entré a la guarida, escondí la ropa en una canasta al lado del sofá y volví a salir. Ahora sólo tenemos que esperar.

Sana sonrió— Toma —ella me dio una pequeña bolsa de skittles—, enséñale a esa científica la química real — se fue en dirección a Momo.

Me escondí en una esquina, esperando que a qué Mina apareciera.

Finalmente llegó después de diez minutos, tomé una respiración profunda. Ella abrió la puerta y entró.

— Aquí voy —me acerqué a la puerta y toqué.

— Hola.

— Hola —respondí—. Uh, ¿Puedo pasar?

Por un segundo tenía miedo que me dijera que no, pero se hizo a un lado sin decir una palabra.

Entré, estuve a punto de retroceder y huir.

— ¿Qué necesitas Chaeyoumg?

— Hice una observación.

— ¿Observación? —dijo confundida, gané el valor para darme la vuelta y mirarla

— ¿Recuerdas cuando me enseñaste el método científico?

— Sí...

— Bueno, el siguiente paso de mi observación es una pregunta —di un paso más cerca—, ¿Quieres continuar?

— Sí —susurró.

— Formé una hipótesis y quiero probar mi teoría —ahora estábamos a un pie de distancia—, ¿Quieres continuar? —repetí.

— ¿Chaeyoumg, qué...?

Me incliné y junte mis labios con los suyos, pero antes de que pudiera devolvérmelo me alejé.

Mina me miró con el ceño fruncido.

— Tengo algo para ti —rápidamente fuí a la canasta y saqué su bata sonriendo. Tomé su mano y la coloque sobre su palma. Ella la agarró con fuerza y salí de la guarida.

¿Vas a venir por mí?

Miré el reloj, ahora los pasillos estaban llenos de estudiantes felices porque el día había terminado. Sí ella no viene en cinco minutos, yo volveré. Caminé y caminé; a medida que pasaban los segundos, y mi casillero estaba cerca había perdido la esperanza

No va a venir. Cerré los ojos.

No quería sentirme decepcionada, pero no pude evitar la punzada en mi pecho. No me importaba, iré a buscarla. Giré bruscamente, pero pare en seco.

Mina me observaba desde el otro extremo del pasillo. La bata blanca se destacaba entre el grupo de personas que nos rodeaban.

— ¿Llegaste a una conclusión? —preguntó cuando estuvo cerca mí.

— Aún no

— Entonces deberíamos tener más pruebas.

Mina juntó sus labios con los míos.

Enredó cuidadosamente sus manos en mi cabello. Estábamos sumergidas en nuestro mundo, en un beso tierno y lento. Mis manos tomaron el cuello de su bata jalándola un poco más cerca.

— ¿Y ahora? —susurró.

— Esto sí fue una reacción química.

— Creo que te he enseñado bien.

Sonreí.

Ligeramente oímos un ruido. Mina se volteó encontrándose a su madre de brazos cruzados y sus tacones golpeando el suelo.

— Hola —Mina se aclaró la garganta—, mamá.

— Detención, ambas, hoy y mañana —dijo con severidad, pero sé que en el fondo está feliz. Ella nos dió una leve sonrisa y se fué.

Mina tomó mi mano— Vamos.

Me guiñó un ojo; en vez de ir a detención. Mi científica me llevó de la mano a su guarida.

Fin

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N/A: Y así terminamos esta historia. Muchas gracias por tomarse el tiempo de leerla y votar cada capítulo, aprecio mucho todos sus comentarios así que muchas gracias nuevamente <3

Psdt: Habrá epílogo 🫶🏻

❝ El lado dulce de la química ❞ || MiChaengWhere stories live. Discover now