💕YOU ARE MY LIFE💕

💕CAPITULO 78💕

Puso a Jianguo en el suelo y entró con cautela a la habitación, lentamente se acercó al hombre, la suave alfombra de pelo largo amortiguo el sonido de sus pasos. De repente abrazo al hombre desde atrás, envolvió una mano alrededor de su cuello, como si quisiera estrangularlo.

— No te muevas, es un asalto.

Un olor familiar llegó a la punta de su nariz. Wang Yibo detuvo sus movimientos, reconoció a la persona detrás de él y dijo con una sonrisa en el rostro.

— Buen hombre, me he quedado sin un centavo. Ahora tengo que confiar en que mi esposa me mantenga. Pero si crees que soy agradable a la vista, puedes jugar conmigo, no me resistiré.

Xiao Zhan sonrió y lo sujetó con ambas manos.

— Eres feo, pero aun te haces el tonto. Primero quítate los pantalones y déjame inspeccionar la mercancía.

— No hay necesidad de comprobarlo, el instrumento es bueno, una vez que lo pruebes lo verás. ¿Viniste a pasar un buen rato?

— Déjame tocarlo primero.

Cuando Xiao Zhan extendió la mano para meterla en su camisa, abrió la boca y mordió la oreja de Wang Yibo.

Yibo sostuvo su mano.

— Pavo real, no juegues con fuego.

Xiao Zhan se rio a carcajadas, se inclinó y lo abrazó, Yibo tenía las manos detrás de su espalda y comenzó a acariciar la cintura de Xiao Zhan, su cara tenía una suave sonrisa.

— ¿Por qué estás aquí? ¿No salías del hospital por la tarde? Planeaba trabajar un poco más aquí e irte a recoger en la tarde.

— No puedo quedarme en ese lugar por siempre. En la mañana, Bible dijo que el pequeño Douding ya estaba bien, así que decidí salir en ese momento. ¿Qué pasa, no soy bienvenido?

— ¿Cómo puede ser verdad eso? Eres bienvenido, debes venir a inspeccionar. Ve a la cama y acuéstate un rato, te mostraré el lugar después de que termine aquí.

Wang Yibo se levantó y empujó a Xiao Zhan hacia la cama, en todo momento evitó que viera en lo que estaba trabajando.

¿Cómo puede ser posible que Xiao Zhan se deje engañar por ese truco? Se puso de pie y abrazó a Wang Yibo, con voz juguetona le dijo.

— ¿Qué intentas hacer? ¿No estarás haciendo algo malo a mis espaldas?

El rostro de Wang Yibo mostró una expresión de vergüenza, algo raro en él, sus manos inmediatamente intentaron bloquear la visión de Xiao Zhan

— Oh, no hay nada que mirar aquí, acuéstate rápido, no te muevas de un lado a otro, o ve a jugar con Jianguo, al conejito de A'Yu le gusta mucho.

Cuanto más se negaba a dejarlo mirar, más curioso se sentía Xiao Zhan. Se inclinó hacia un lado, se deslizó a través del brazo de Wang Yibo y vio lo que estaba frente a él de un vistazo.

Era un montón de tiras de madera, largas y cuadradas... estaban clavados juntos, ya tenían forma rectangular. Además de las maderas, había una revista a un costado, Xiao Zhan se inclinó y la recogió, era un tutorial para hacer una cuna.

Xiao Zhan arqueó las cejas con sorpresa y miró a Yibo

— ¿Esto es...?

— Está bien, no lo mires, no hay nada bueno, ¡cierra los ojos! Date la vuelta, busca a Jianguo.

Yibo tomó la revista con la mano y la tiró sobre la cama; sus cejas estaban hacia arriba, su voz había sonado más fuerte, como si estuviera enojado, pero Xiao Zhan podía decir de un vistazo que el pícaro estaba realmente avergonzado.