Mierda, es bueno.

Él lamió y se llevó cuanto pudo dentro de la boca, succionó e incluso jugueteó con sus malditas bolas, apretando, acariciando y también succionandolas de vez en cuando. Rei estaba perdiendo la cabeza.

Este era Kazuki, su compañero de piso, su compañero de trabajo y su compañero en toda la cosa de la paternidad, mientras le retenía de las rodillas porque Rei se sentía tan, pero tan bien que la estimulación le resultaba inquietante y era demasiado para soportar.

Pero Kazuki, el mismo Kazuki de siempre, no le permitió cerrar la piernas y alejarlo, lo obligó a mantenerlas abiertas y recibir su atención, incluso cuando Rei sentía que estaba a punto de suplicar para que parase porque era demasiado.

Rei levantó la mano e intentó de nuevo alejarlo, pero fue imposible, Kazuki lo retuvo de la muñeca, su antebrazo impidiendo que la pierna liberada se alzará.

—Mierda, basta—Se retorció y se mordió el labio inferior para evitar que un sonido similar al sollozo saliera de su boca —. Harás que me corra antes de tiempo. Ya estoy excitado así que pasa al siguiente nivel.

Cuando Kazuki liberó su polla, Rei pudo recuperar la respiración y despejar un poco la bruma en su mente. Había pasado demasiado tiempo desde que había hecho algo en este ámbito de su vida, así que debería enfocarse más en satisfacer a Kazuki lo antes posible y librarse de esto, porque no estaba seguro de poder aguantar demasiado.

—Eres un beta—dijo Kazuki mientras se alzaba por sobre él para poder alcanzar el cajón de su mesa de luz —. Todavía tengo que prepararte.

Tenía un botella de lubricante en la mano y unos condones cuando volvió a su sitio.

Rei suspiró, había tenido sexo anal una sola vez en su vida, le había resultado incómodo, algo doloroso y después fue relativamente placentero. El inicio no le había gustado, por lo que decidió que se quedaría como una única experiencia en su vida, sin embargo, aquí estaba, dejando que Kazuki le levantará las rodillas hasta el pecho pidiéndole que las mantuviera ahí, y finalmente untando una buena cantidad de lubricante en sus dedos para comenzar a prepararlo.

Jodidamente incómodo.

Tenía el dedo de su compañero asesino metido en el trasero, quería alejarse de esa idea por lo que para entretenerse se dedicó a ver cómo Kazuki, ya completamente desnudo, se masturbaba pausadamente con su otra mano.

No fue un enfoque mejor, pero era definitivamente más apacible a la vista. Su polla era grande, larga y gruesa, estaba chorreando bastante y los ligeros gemidos que soltaba Kazuki eran bastante estimulantes para su propia polla, aunque en otro momento del día Rei se hubiera burlado de él porque parecía un perro sediento.

Permitiéndose verlo en todo su esplendor pudo notar por primera vez que, en realidad, Kazuki era un tipo bastante atractivo, bueno, él ya sabía eso de manera lejana y por comentarios ajenos, pero ahora podía verlo realmente. Tenía una cara amigable la mayor parte del tiempo, pero ahora con toda esa seriedad, rubor y excitación en todo su rostro, bueno... era muy caliente, y Rei no consideraba muchas cosas con esa palabra y en esa connotación.

Rei siseó de repente por un segundo dedo, Kazuki lo miró a la cara y se lamió los labios.

Este bastardo quiere verme llorar, se recordó mientras aguantaba los movimientos en forma de tijeras ahí abajo. Kazuki mantuvo su otra mano fuertemente apretada en su propia polla hinchada, también algunas venas en sus brazos y cuello comenzaban a marcarse, parecía más ansioso que antes.

—Oye —llamó Rei—, ¿estás en alguna cosa como el sadismo o algo?

—¿Por qué? ¿Te duele? —preguntó a la ligera, sin detenerse de todos modos.

Compañeros [KazuRei]Where stories live. Discover now