La mamá de JungKook sonrió ante el lindo chico que la saludaba con tanta educación. ¿Acaso todos los hijos de esa familia eran igual de agradables y apuestos?

—La última vez estuvo lloviendo y no pude saludarlos—la señora Jeon miró a su hijo, quien miraba alrededor con curiosidad, y sonrió—. Pero pude conocer a tu hermano.

—Oh, TaeHyung hyung no está ahorita con nosotros—respondió mirando hacia la casa, por donde salía su mamá—. Él ya está con su equipo, preparándose para el partido.

—Espero que le vaya muy bien.

Observaron cómo NamJoon llamaba a su mamá, quien dejaba otras cosas en el auto. La señora Kim se acercó sonriente, saludando emocionada a JungKook y sonriendo hacia la señora Jeon.

Las dos mujeres no tardaron en congeniar, iniciando una conversación sobre las dificultades de tener hijos adolescentes. Los dos amigos las observaron unos segundos y luego decidieron alejarse de aquel lugar, no querían terminar recibiendo algún regaño o queja por su parte.

— ¿Y SeokJin? —preguntó el recién llegado.

—Está dentro con mis tíos, ven.

Entraron a la casa, donde había mucho movimiento. Vio a varias personas pasar entre la cocina y la sala de estar, e incluso escuchó pasos en el segundo piso. No pasaron más de treinta segundos y logró ver a SeokJin bajar por las escaleras mientras se colocaba una gorra.

—¡Hey!, ¿cuándo llegaste? —preguntó cuando se acercó a ellos.

—Hace un par de minutos—contestó señalando hacia donde habían dejado estacionado el auto—. De hecho, nuestras mamás están hablando en el jardín.

SeokJin soltó una risa y se asomó para corroborar las palabras de su amigo.

—Hombre, tendré que alejar a mi mamá de ahí.

—¿De dónde, Kim SeokJin? —preguntó una voz femenina que se acercaba desde la cocina. JungKook vio llegar a una mujer pequeña y con rasgos adorables, incluso podía reconocer la misma sonrisa que era tan característica en su amigo.

No había duda de que se trataba de la madre de SeokJin.

—De ningún lado, mamá—contestó nervioso mirando alrededor, buscando una distracción. Y de hecho no tardó en encontrarla—. Él es JungKook, nuestro amigo de la escuela.

La mamá de SeokJin olvidó su antigua molestia y miró emocionada a JungKook, quien no sabía qué hacer en esos casos.

—He escuchado mucho sobre ti—dijo la mujer sonriéndole. JungKook se inclinó como saludo—. Eres mucho más lindo de lo que pensé.

JungKook se sonrojó y sorprendió cuando la señora Kim se acercó a él, pellizcándole los cachetes. En definitiva, no esperaba algo como eso.

Unos minutos después la mamá de SeokJin también salió al patio, encontrando a las otras dos señoras conversando. No dudó ni un segundo en unirse a ellas.

Por su parte JungKook conoció a los padres de sus amigos, era extraño que todos lo recibieran con amabilidad y sonrisas. Había pensado que habría un ambiente incómodo debido a que un completo extraño, como él, se estaba uniendo a una actividad familiar. No podía negar que sentía un gran alivio al ser aceptado por todos ellos, y en menos de diez minutos él también comenzó a ayudar a la apurada familia a acomodar y guardar todo lo que llevarían al partido.

Media hora más tarde se despidió de su mamá, quien salió encantada con la familia Kim, y le indicó que se portara bien y tratara de ayudar en todo lo que le fuera posible. No era necesario que le recordara aquello.

Flechazo | KookTaeWhere stories live. Discover now