Lucia. ¿ Ximena?

Ximena: creo que ya sé cuál va a ser nuestra mejor venganza.

Lucia: te escucho- dijo emocionada-

Ximena: no, es algo que debemos hablar personalmente, porque no vienes al hotel donde me estoy quedando?

Lucia: claro, dame la dirección.

Daniel y Regina pasaron por su hija para ir a comer al departamento, escoltados como habían quedado la noche anterior, durante la comida, la niña les contaba que su tía Sofía ya había escogido su vestido para la boda.

Regina: es cierto tú vas a llevar los anillos, y nosotros seremos los padrinos.

Daniel: si, lo había olvidado, bueno ¿cuando es la boda?

Regina: en dos semanas.

Daniel: bueno hay tiempo suficiente para todo.

Miranda: ¿y ellos también se van de viaje?

Regina: claro mi amor, como todos los recién casados.

Miranda: ¿y que tanto hacen?

Daniel: ¿ en dónde?

Miranda: pues en el viaje.

Regina y Daniel se miraron con una risita nerviosa.

Regina: pues pasarla bien.

Daniel: exactamente, divertirse.

Miranda: ahh pero los niños también podemos divertirnos, si ustedes no me llevaron a su viaje ellos sí podrían?

Regina y Daniel: ¡ No!

Regina: lo que pasa es que como te dijimos antes esos viajes son para los recién casados nada más, y son aburridos.

Miranda: pero me dijiste que la pasaban bien.

Daniel: muy bien. Dijo con una sonrisa picarona.

Regina: la pasamos bien haciendo cosas de adultos.

Miranda: ¿Cómo qué?

Regina: como ir a museos.

Daniel: a la iglesia.

Miranda: eso no suena divertido.

Regina: para los niños no, pero para nosotros los adultos sí.

Esperanza: ¿ya te lavaste los dientes? Hay que hacer la tarea.

Miranda: ya voy nana.

Regina: buenos nosotros debemos regresar a trabajar.

Daniel: nos vemos en la noche.

Ambos se despidieron de su pequeña, se subieron al auto y se encaminaron al terreno que tenían pendiente.

El lugar era enorme, el proyecto que estaba en marcha dejaría muy buenas regalías.

Mientras tanto Lucia y Ximena de nuevo estaban juntas.

Lucia: tu idea es siniestra y arriesgada, pero me gusta.

Ximena: hay que buscar la mejor oportunidad para llevarla a cabo, podemos dividir la ganancia a la mitad.

Lucia: el dinero es lo que menos me importa, algo así incluso hasta gratis lo hago.

Ximena: entonces vamos a afinar los detalles durante los próximos días y de esto ni una sola palabra a nadie.

Lucia: despreocúpate nadie más que nosotras lo sabrá.

Ambas se rieron.

Después de casi dos semanas los preparativos para la boda de Sofía y Gabriel estaban listos, la recepción seria en la casa de sus padres y los invitados solo la familia y amigos más cercanos.

Regina acompañò a recoger el vestido de su hermana y a la vez a comprar uno para ella, mientras que Daniel acompañò a su amigo por tu traje.

Mientras Gabriel se veía al espejo su mente parecía estar divagando.

Daniel: este si es tu talla, Gabriel, Gabriel ¿estás aquí?

Gabriel ¿me decías?

Daniel: que ya tengo tu talla en este traje que te querías medir.

Gabriel: gracias.

Daniel qué te pasa? ¿Por qué estas tan pensativo? ¿No me digas que ya te arrepentiste?

Gabriel: por supuesto que no, es que me da miedo que mi relación con Sofía se enfrié cuando nazca el bebe.

Daniel: ¿y por qué piensas eso?

Gabriel: es que por ahí dicen que cuando llegan los hijos los esposos pasamos a segundo plano.

Daniel: te conozco, a ti lo que te preocupa es que la frecuencia de intimidad con tu esposa se vea afectada por la llegada de su bebé,  ¿verdad?

Gabriel: pues.

Daniel: ay amigo tu no cambias, y no te preocupes que esos son solo mitos, en mi caso al menos eso no ha pasado.

Gabriel: pero tú te ahorraste el embarazo de Regina.

Daniel: es algo que no me hace sentir orgulloso, pero a lo que voy es que esta en ti, más bien en los dos saber distribuir adecuadamente su tiempo como pareja y como padres, mientras sea correcto te aseguro que no habrá problemas.

Gabriel: si tú lo dices.

Daniel: bueno, ve a probártelo.

Regina y Miranda llevaron a Sofía a su departamento.

Sofía: le hicieron tantos arreglos al vestido que espero no se note.

Regina: es que lo mandaste a hacer muy rápido, no te acordaste del embarazo.

Sofía: estaba tan emocionada que sí, lo acepto no tuve muy en cuenta que iba a salirme panza.

Regina. Bueno pues estas a solo un día de usarlo y ya está listo.

Sofía. Al menos el modelito que escogí disimula mi panza.

Regina: si, más o menos.

Arturo se acercaba al estudio de su casa cuando las escuchò hablar...

Ximena: mañana es el gran día.

Lucia: al fin nuestra venganza será una realidad.

Ximena: Regina y Daniel van a desear no haber nacido.

EL GIRO DE LA VENGANZAUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum