Cuidando a unos Imbéciles

Epilogo

―Silver, Ul. Si vinieron ―dijo la maga estelar sorprendida.

―Obvio que si Lucy-san, jamás me perdería el cumpleaños de flamita ―dijo Ul tronando sus dedos ―. Y al parecer ya vino Lily.

―Oh cubo de hielo, viniste ―Lily igual se trono los dedos, listas para la pelea.

―Creo que deberían esperar mejor a Layla, si pelean sin ella se enojaran ―les aviso Simón de brazos cruzados.

Ambas niñas lo pensaron bien y tenía razón, era mejor esperar a flamita.

...

Llevaban un muy buen rato caminando como idiotas, solo daban vueltas y vueltas y no hacían absolutamente nada. Los dos niños ya estaban cansados. Uno tenía cabellos rubios y ojos chocolates, llevando una bufanda en su cuello, la niña de tenia cabellos rosas y ojos esmeralda, esos dos niños son Draco y Layla Dragneel.

―Papaaá, ya estamos aburridos ―dijo Layla haciendo un puchero ―. Tengo hambre.

―Sí, yo igual ―concordó Draco.

―Pero si hace menos de 1 minuto les di fuego ―les recordó Natsu a sus hijos.

―Sí, pero recuerda...―dijo Layla.

―Sacamos tú apetito de bestia ―le dijo Draco.

A Natsu se le hincho una vena en la frente. "¿Por qué no usamos protección?" Se preguntó a sí mismo. Solo unos minutos más y ya volverían a la casa y podría comer todo lo que su Lucy había hecho.

―Que aburrido cumpleaños ―dijo Layla haciendo un puchero.

El Dragneel mayor vio a su hija hacer eso. No le gustaba que su princesa estuviera así, lo odiaba, pero todo tendría que estar perfecto para la fiesta sorpresa.

―Ya quiero ir a la fiesta ―dijo Draco levantando los brazos con desesperación.

La peli rosa abrió los ojos como platos, mientras que Natsu se daba un golpe en la frente.

"Debimos usar protección" pensó en sus adentros.

― ¿Qué fiesta? ―pregunto Layla con desesperación.

―Oh, la fiesta sorpresa que te teníamos preparada, habrá juegos, comida y abrí los boca y dije cosas de mas ―dijo Draco al ver a su padre molesto ―. ¿Me golpearas cierto?

Natsu asintió.

―Okay ―dijo Draco preparándose para lo que venía.

Un fuerte grito se escuchó.

...

―Todos escóndanse ―susurro Cana, agachando en un sillón con una niña de cabellos rojizos, esa niña es Cornelia Clive.

Todos se escondieron bajo los sillones de la sala de estar para dar el gran grito de sorpresa.

―Aquí vienen ―susurro Lucy desde su lugar.

La puerta se abrió dejando ver una sombra grande, seguida de dos pequeñas.

―Eso dolió mucho, papá ―dijo el pequeño niño aun sobando su cabeza.

― ¡Sorpresa! ―gritaron todos a la pequeña niña la cual ni se inmuto ante eso.

Todos los ahí presentes se quedaron en blanco que diablos pasaba.

―Aaah, gracias ―dijo Layla simplemente mientras tomaba camino a la cocina.

A todos se les desencajó la mandíbula al ver que ds de fuego le valió madres la gran sorpresa.

― ¿Natsu? ―su esposa estaba más que confundida ante lo sucedido.

―A mí ni me veas, todo fue culpa de Draco.

― ¡Hey!

Todos vieron con miradas desaprobatorias al niño rubio el cual solo agachaba la mirada.

―Para nada hicimos un largo viaje ―dijo un pelinegro.

―Todo para que Draco lo arruinara ―dijo un rubio junto a una albina que asentía levemente.

Para ser exacto ahí estaban dos albinas, los cuatro de ahí dejaban ver la marca de dientes de sable. Junto a esas parejas estaban dos niños, un albino oji azul y un pelinegro de ojos carmesí. Esos dos niños son Jay Eucliffe y Renji Cheney.

― ¡Muy bien! ―Lucy llamo la atención de todos ahí ―Aquí nada paso, sigamos celebrando.

Todos se dispersaron como moscas adultos en un lado y niños en otros.

―No puedo creer que el volcán andante arruinara esto para Layla-chan ―dijo Silver.

―Es un imbécil ―dijo Gale mientras los demás le daban la razón.

―Ustedes quieren pelea, hielito, hierro oxidado ―les reto Draco poniendo en posición de ataque.

―Vente aquí flamita ―le dijo el Fullbuster menor.

―A mí no me olviden.

Los tres comenzaron a pelear en medio de la sala creando una nube de polvo, había golpes hielo, fuego y hierro por todos lados, sus respectivas madres miran dicha escena con decepción.

―Ustedes imbéciles, les enseñaron eso ―les dijo Levy enojada.

―Estúpidos ―les dijo Lucy.

―Lo que dijeron ellas ―agrego Juvia.

Los tres slayers solo voltearon a otro lado, quedando a ver otra pelea que ahí se daba.

Eran tres niñas las que ahí peleaban y eran nada más y nada menos que Ul, Layla y Lily.

―Hasta ellas tienen que pelear así ―dijo Gray impresionado.

― ¡¿Tan mala influencia somos?! ―pregunto Natsu al aire.

Gajeel ni podía creer lo que ahí veía.

―Son iguales a sus padres, ¿no crees nee-san? ―le dijo Lisanna a su hermana.

―Demasiado.―les respondió la señora Dreyar―Por lo menos Jay es poco más calmado.

―Si ―dijo la señora Eucliffe.

Por otro lado la pareja Fernández disfrutaba de todo el lindo cumpleaños de Layla, el cual a pesar de todo estaba saliendo muy bien. Sus hijos miraban con desaprobación las peleas de los niños y niñas, eso era algo incorrecto.

Fue una muy linda fiesta a decir verdad. Los niños jugaron, se divirtieron, comieron (algunos como bestias), los adultos hicieron lo mismo que los niños. Todo estuvo más que divertido. La felicidad que ellos tenían no se les iba a ir por nada del mundo, por fin todos habían logrado sus sueños con las personas que amaban, tenían familias muy felices y aunque esos niños les sacaran canas verdes, no importaba ya que ellas cuidaron a unos peores imbéciles.

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Metalicana Redfox(Hija de Gajeel y Levy) - 10 años.
Gale Redfox(Hijo de Gajeel y Levy) - 8 años.
Lily Redfox(Hija de Gajeel y Levy) - 8 años.
Draco Dragneel(Hijo de Lucy y Natsu) - 9 años.
Layla Dragneel(Hija de Lucy y Natsu) - 8 años.
Reza Fernández(Hija de Erza y Jellal) - 10 años.
Simón Fernádez(Hijo de Erza y Jellal) - 9 años.
Cornelia Clive(Hija de Cana) - 8 años.
Jay Eucliffe(Hijo de Lisanna y Sting) - 8 años.
Renji Cheney(Hijo de Rogue y Yukino) - 8 años.

Editado el: 18-12-2015