𝐕𝐞𝐧𝐞𝐜𝐢𝐚

18 cumpleaños

—Todo tiene que salir perfecto —pensé.

—Nick no cumple 18 todos los días —dije emocionada y con una gran sonrisa en la cara. Elizabeth la novia de Nick me ayudaba a preparalo todo, habíamos convencido entre las dos a los padres de él para celebrar una fiesta por su cumpleaños.

Habíamos invitado a todos sus amigos del instituto ya que él siempre se quejaba de que nunca tenía tiempo de verlos. Habíamos colgado globos por todo el comedor entre ella y yo, más tarde, llegarían sus amigos.

—Menos mal que los padres de mi Nicky nos han dejado la casa mientras ellos trabajan —dijo ella emocionada y haciendo énfasis en mi Nicky.

Ella y yo, nunca nos habíamos llevado muy bien, pero al ser ambas personas cercanas a Nick nos veíamos a menudo, así que decidimos tratarnos con respeto, pero nada más, ni una amistad ni una enemistad, simplemente nada. Ni siquiera había tenido ella la idea de la fiesta sorpresa, ¡Había sido mía! Y era obvio que la tenía que invitar, era la novia del cumpleañero, es como si Nick fuera el rey en un tablero de ajedrez y Elizabeth fuera la reina, puedes jugar sin ella pero no es igual de emocionante.

—¿Cuándo decías que llegaban los demás? —me preguntó Elizabeth, con su tono de superioridad.
—Están al caer —le conteste suspirando aburrida. En ese momento sonó el timbre y Elizabeth se acercó rápidamente a la puerta para recibir a los amigos de su novio.

—Hola chicos, dijo con su voz suave y aterciopelada que a todo el mundo le encantaba, bueno, a todo el mundo menos a mí, yo en vez de una voz bonita, la encontraba irritante.

—Hola Beth —la saludó James, el mejor amigo de Nick, dándole un fuerte abrazo, era algo sospechoso, pero en fin, era un simple abrazo ¿No?

—¿Que hay enana? —Dijo cuando se acercó a mí, siempre había sido más alto que yo y de verdad que James a veces podía ser un amargado, pero casi siempre era un buen chico. Es el único de los amigos del instituto de Nick que conozco, ya que como es su mejor amigo, habíamos quedado muchas veces. Detrás de James empezaron a entrar unos cuantos chicos y alguna que otra chica, que se presentaron amablemente. Al final no fuimos tantos como supusimos, éramos unas 10 personas.

Todo el mundo hablaba con alguien mientras yo solo podía pensar en si a Nick, le iba a gustar esto, él no era muy sociable y a pesar de que fuesen sus antiguos compañeros, no sé si a él le hará gracia encontrarse a toda esta gente en su casa, no podía parar de darle vueltas al tema. Le gustaba estar solo y las únicas personas con las que se juntaba era con Elizabeth, James y a veces conmigo.

Pero era tarde.
La puerta del ascensor sonó.
Mierda.

—¡Corred! —dijo bastante alto una voz que no reconocí, todos nos escondimos, apagamos las luces y nos quedamos en un silencio inquebrantable. Unos segundos después se escuchó como abrían la puerta y pude ver cómo un Nick cansado de entrenar entraba a casa con sus rizos algo mojados por el sudor.

—¡SORPRESA! —dijimos todos a la vez, la cara de Nick fue un poema, no sabía si en el buen o mal sentido, sus ojos tenían un ligero brillo que se podía interpretar de varías maneras.

—¿Sor-sorpresa? —dijo él atónito. Elizabeth se acercó a él y lo abrazó.

—Feliz 18 cumpleaños amor —dijo con un tono que creo que solo yo noté que era fingido.

—gracias... —pude leer en sus labios ya que lo dijo en un susurro, se quedó unos segundos es shock y apartó de Elizabeth en un rápido pero cauteloso movimiento, me agarró de la mano y subió las escaleras de su casa conmigo rápidamente. Entramos en su cuarto, en el que siempre nos quedábamos hablando tumbados en la cama cuando yo iba a su casa.