It's giving me chills.

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Steve: El demogorgón volvió Bella, y no solo en uno, volvieron Miles, y Will está siendo un espía del desoyamentes.

Arabella: Esto tiene que ver con lo que me dijo Jonathan, ¿Verdad?

Steve: No tengo idea de que te dijo, pero si te dijo que Will estuvo en el otro mundo y no perdido en el bosque, estás en lo correcto.

Arabella: Bien, ¿Y qué haré yo?

Steve: Lo veremos en la casa de los Byers, tú solo trata de defenderte ante cualquier situación, estaré contigo siempre, pero eres más ruda que yo y eso no hay que discutirlo.

Todos en el auto sonreímos ante la bobería de Steve, pero después de unos minutos de silencio, estábamos en la casa de los Byers.

Max y yo bajamos del auto con cuidado y rápidamente deje salir un suspiro.

Arabella: Quería venir a la casa de los Byers, pero no en estás circunstancias.

Steve cerro la puerta del auto y me tomo de los hombros.

Steve: Todo está bien, solo tengo que decirte que eso allá adentro parece una obra de arte, hay dibujos por todas partes.

Le dedique mi mejor sonrisa, y al entrar estaban Lucas, Dustin y Mike sentados en el sofá.

Arabella: Hey, ¿Cómo están?

Lucas: Gracias al cielo hay alguien responsable.

Arabella: ¿De qué hablas?

Dustin: Alguien tendrá que quedarse con nosotros, y Steve no era la mejor opción.

Steve: Oye niño, no soy malo, pude hacer mi mejor esfuerzo.

Arabella: Diablos Steve, ¿Seré la niñera?

Max: Es mejor así Bella, podrías defendernos si pasa algo.

Arabella: Bien, no me molesta, adoro a estos niños, pero no seré niñera de nadie si no vienen aquí y me reciben con un gran abrazo.

Entonces me agaché y Dustin y Max fueron los primero en estar en mis brazos, después Lucas son su gran sonrisa y el amargadito de Mike al último, no tenía muchas ganas a decir verdad.

Dustin: Gracias por no dejarnos solos.

Lucas: Después de esto, ¿Podrías llevarnos al Arcade? Creo que tendremos que distraernos.

Reí un poco pero asenti.

Arabella: Los llevaré las veces que sean necesarias.

Nos separamos uno del otro y unas voces que conocía provenian detrás de mí, y al verlos, eran Nancy y Jonathan.

Nancy: A mí también me gustaría un abrazo.

Jonathan: Creo que a mí tampoco me vendría mal.

Me levanté y fui directo a ellos, nos abrazamos los tres, un tierno y cálido abrazo.

Nancy: Gracias por venir Bella, creo que te necesitamos.

Arabella: Haría cualquier cosa por ustedes tontos, son mis amigos.

Jonathan: Tú solo serás la niñera un rato, ¿Esta bien?

Arabella: Esta perfecto.

Después de tantos abrazos y platicas, me senté en el sofá, y los chicos excepto Mike estaban a mi lado, hablando y tratando de distraerse de el cruel mundo que nos atormentaba.

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