La voz era de Brady, el tono en su voz era triste/molesto.
—Yo... Puedo explicarlo— dijo.
—¿Quien es el?— pregunto Georgie.
—__ no tienes nada que explicar, solo te estaba buscando para darte esto— dijo entregándole una cajita— pero ya no importa— dijo para así irse.
Dentro de la cajita de encontraba una notita que decía.
"Estuve encantado de conocerte."
Era la letra de una de las canciones que más le gustaban a __, era Enchanted de Taylor Swift, la cajita contenía un ramito hecho a mano y un par de chocolates, los favoritos de ella. Sus ojos se llenaron de lágrimas.
—Brady espera— dijo mientras corría detrás de él.
Atrás de ella estaba Georgie, su cara era de tristeza, lo único que pudo hacer fue retirarse. ___ corría detrás de Brady, hasta que pudo alcanzarlo.
—Espera, por favor— lo detuvo.
—Yo lamento haberte interrumpido, no era mi intención y ya entendí que mi tiempo contigo se acabó, te quiero ___ y me hubiese gustado saber que yo te gustaba, para hacer algo— se fue.
—No, espera— dijo mientras corría para cruzar la calle y alcanzarlo, su intento fue en vano, el ya se había ido, ___ solo entró a la casa y se encerró en su cuarto, sus lágrimas comenzaron a salir, por un pequeño error perdió el poder estar con Brady, con quien había querido salir desde noveno grado.
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—___ mi vida alguien vino a visitarte— dijo su madre desde abajo.
___ estaba sin ánimos, las gotas de lluvia pegaban en su ventana y la llenaban, ella estaba acostada, aún en pijama, ya habían pasado 3 días de aquella fiesta y no sabía nada de aquel chico de ojos azules y cabellera dorada que tanto la traía mal. De pronto se oyó la puerta, se trataba de George.
—Hola— la saludo— solo vine a despedirme, ya me voy— se sentó en una esquina de la cama— Yo... lamento haberte besado en la fiesta, no sabía que salías con alguien.
—No salgo con nadie, Brady es... solo un amigo, solo eso— la última palabra tenía un tono triste.
—Pero te gusta, y eso está bien— le sonrió.
—Perdón por no decir nada—lo abrazo.
Estuvieron abrazados por un largo rato, hasta que ___ comenzó a llorar.
—Lo siento— dijo nuevamente.
—Hey, todo está bien, en serio descuida— la separo de él y seco sus lágrimas.
Platicaron por un gran rato más, hasta que el se tuvo que ir.
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____ se encontraba en un gran dilema, no sabía si ir a ver a brady o no ir a verlo.
Por fin se decidió y salió caminando hacia la casa de él. La lluvia aún no terminaba, pero era más tranquila, se dirigía a la casa del chico.
Cuando por fin llego tocó el timbre, la madre de él fue quien le abrió.
—___ hola, no sabía que venías.
—hola ¿Esta brady?
—Si en su habitación, pasa.
___ subió las escaleras, conforme avanzaba los escalones su corazón latía al 1000 por hora, hasta que por fin llegó, estaba parada frente aquella puerta color crema, tomó valor y por fin tocó la puerta.
—Adelante— se escuchó dentro de la habitación.
Abrió la puerta, ahí estaba él, acostado en su cama.
—Hola— saludo ___—¿Puedo?
—Adelante— dijo acomodándose.
—Yo... venía a disculparme.
—Sabes que no es necesario.
—Si lo es Brady, yo... El beso que viste en la fiesta no fue nada porque en primera Georgie me beso y segunda porque a mi no me gusta el, a mi nunca me gusto, me confundió pero no me gusto, a mi me gustabas tu, siempre has sido tu, desde noveno grado, siempre me gustaste y...— fue interrumpida por un beso del rubio.
Ese beso que se dieron fue mágico, podían sentirse los fuegos artificiales, parecía que en ese momento solo existían ellos dos en el mundo, después de tanto tiempo por fin ___ podía ser feliz con el y podía sentir esa sensación que el le provocaba. Al par de segundos se separaron.
—___ tu también me gustas y eso ya lo sabías porque yo te lo dije pero créeme que no me cansaré de decírtelo, ___ quiero que lo intentemos, quiero tener algo lindo contigo ¿Podemos empezar a salir?— la miro.
—Si, por supuesto que si— sonrió para después darle un beso.
