💕YOU ARE MY LIFE💕

💕CAPITULO 63💕

— ¡Soy yo quien te ama, el que te persigue e intenta subir! ¡He hecho todo tipo de trucos descarados! Pero estoy dispuesto y mis sentimientos son puros.

Las mandíbulas de algunas personas cayeron al suelo y no podían creer lo que oían.

«El hermano Wang... ¿qué le pasa al hermano Wang? ¿Cómo pudo haberle dado todo su patrimonio a ese pequeño jefe? E incluso le dio todo Haoting... esto no es una fantasía, ¿verdad?»

A Qiang sabía que estaba realmente muerto esta vez, ofendió a Xiao Zhan, por lo que se escondió detrás de Yixuan con miedo.

En ese momento, el rostro de Yixuan era casi transparente, y sus hermosos ojos miraban a las dos personas frente a él con incredulidad, estaba completamente atónito.

Pensó que Xiao Zhan no era más que la nueva diversión de Wang Yibo. Definitivamente pensaba que su relación no era mejor que la de ellos, que se habían conocido desde hacía décadas, pero era obvio que Yibo hablaba en serio, lo trataba mejor que a cualquier otra persona.

Xiao Zhan lo miró y le dio unas palmaditas sin mostrar ningún gesto ostentoso. Esto es todo lo que se merece, no hay nada que lo seduzca, y no hay necesidad de mostrárselo deliberadamente a alguien. Basta con que algunas personas lo sepan.

— Vamos.

Xiao Zhan aplaudió y se dio la vuelta.

Wang Yibo suspiró en su corazón y lo siguió sin siquiera ver a Yixuan.

Esta vez realmente cayó en manos de Xiao Zhan. No solo perdió toda su riqueza, sino que también le hizo hacer eso frente a tanta gente. Desde el interior hasta la cara, compró uno y se llevó otro gratis, incluso consiguió envió gratis.

* * * *

Xiao Zhan entró inexpresivo al área de huéspedes. El camarero de la puerta quería acercarse y pedirle que mostrara su identificación. Como resultado, Wang Yibo les hizo un gesto con la mano para que lo dejara en paz.

No dijo una palabra en todo el camino y caminó en línea recta, sabiendo que Yibo estaba detrás de él, pero ni siquiera giró la cabeza para mirarlo. Cada vez que Wang Yibo quería alcanzarlo, aceleraba el paso y seguía manteniendo su distancia.

Wang Yibo se contuvo todo el camino, sentía cierta incomodidad en su corazón, y cada vez que tomaba la iniciativa de hablar, los ojos de Xiao Zhan lo miraban con furia. Sabía que había fallado esta vez y había causado un malentendido tan grande. Preferiría que Xiao Zhan lo golpeara para hacerlo sentir mejor y no estar en una guerra fría como esta.

Antes, dijo que había estado reprimiendo cosas en su corazón durante mucho tiempo. Ese tipo de inseguridad hizo que hiciera algo mal, pero Xiao Zhan no le había dado una respuesta a eso, lo que enfriaba el corazón de Wang Yibo.

Entiende que Xiao Zhan es una persona reservada, e incluso si se siente incómodo, no se lo revelará a los forasteros, así que deberá esperar a que estén en la habitación, con la puerta cerrada, ahí le llegara la despiadada sentencia de Xiao Zhan.

Dos personas caminaron, una tras la otra, hasta la entrada del ascensor en el primer piso. Xiao Zhan extendió la mano para presionar el botón. Wang Yibo no pudo contenerse más y presionó el dorso de su mano y estuvo a punto de abrir la boca para hablar. Xiao Zhan extendió la mano e interrumpió.

— No me hablas ahora, de lo contrario no garantizo que no haga nada.

— Zhan...

La cara de Yibo estaba oscura, y se frotó la frente dolorida con fuerza, su traje ya estaba todo arrugado.