Final.

6.3K 703 221
                                    

Familia Hwang, 5 años.

—¡Deja a los niños!.—Exigía la señora Hwang hacía su marido.

—¡Tu no eres nadie para decir cómo educar a mis hijos!.—Reprochaba el señor bajo los efectos del alcoholismo, bruscamente.

Debajo de la mesa de la cocina en la que el matrimonio se encontraba discutiendo se encontraban los dos pequeños mellizos Hwang, cada uno con los ojos llorosos y a punto de soltarlo todo. —Hyun... ¿Cuanto mas falta...?.—Le preguntaba la chica hacia su hermano que le cubría los oídos con sus pequeñas manitas.

—Duérmete Yeji, cuando te levantes todo estará bien ¿Ok?.—Preguntaba el pequeño niño en un intento desesperado de calmar a su hermana para que su padre no se percatara de la presencia de los dos pequeños infantes.

Familia Hwang, 12 años.
—¡Compórtate como una señorita y mantente en silencio!.—Solicito el señor Hwang una vez la chica se interpuso cuando el hombre trataba de golpear a su madre con una botella rota.

—¡Déjala! ¡Golpéame o haz lo que sea pero déjalas! Por favor...—Suplico el adolescente a su padre.

La pequeña adolescente al notar la distracción de su padre actuó lo más rápido que su cerebro le permitió, tomo la botella que yacía en el piso, levantó el objeto afilado con las manos temblorosas y lágrimas desbordando, preparada para hacer lo que su padre intentó hacer con su madre minutos antes y lo que los llevó a esta situación.

—¿Quien te crees para hablarme así?.—Pregunto irónicamente el padre llevando una mano hacia arriba intentando golpear a su hijo, cosa que ocasionó que el niño se hiciera pequeño en su lugar, atemorizado.

La chica elevó la botella y dio un gran impacto en la cabeza de su padre, tirándolo al suelo, dejándolo inconsciente.

—¡Niños corran! Salgan de aquí y vayan a casa de la abuela, yo me quedaré con su padre, por favor...—Pidió la madre de ambos niños, que se ayudaban mutuamente a levantarse.

—Hyunjin corre.—Repitió la madre cuando su hijo trató de levantarla para salir juntos.—Yo no puedo salir de aquí, pero tu si. Sal de aquí con tu hermana.

El alfa estaba puerto en cuclillas rascándose los brazos, dejando marcas que al día siguiente serían rojas

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

El alfa estaba puerto en cuclillas rascándose los brazos, dejando marcas que al día siguiente serían rojas.

—¡Hyunjin!.—Gritó la omega que entraba a la casa al ver a su hermano tirado, llorando y soltando gritos ahogados. —¿¡Que le hicieron hijos de puta!?.—Reclamó la chica volteando a ver a los dos hombres mientras sostenía las manos de su hermano evitando que se lastimara más.

—¿Como dejas que tus hijos te hablen así? ¡No quiero una esposa grosera! Esta fusión se acabó.—Decreto el hombre más grande saliendo de la casa.

—¡Ambos a su habitación! Y no salgan de ahí si no quieren tener problemas conmigo.—La omega, que para este punto estaba llorando alzó a su hermano para llevarlo arriba y dormirlo con pastillas, por que Hyunjin no dormiría en días y no se calmaría si no lo dormían.

Han pasado 3 días desde que Hyunjin se le declaró a Felix, y Hyunjin no había dado señales de vida hasta el momento

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Han pasado 3 días desde que Hyunjin se le declaró a Felix, y Hyunjin no había dado señales de vida hasta el momento.

No se había presentado a la fiesta de Changbin ni había respondido a los mensajes que enviaban. Así que después de una llamada rápida a Changbin consiguió la dirección de su alfa y ahora estaba camino a casa de Hyunjin.

Tocó a la puerta siendo recibido por Yeji, que lo dejó pasar al ver las ojeras y cara angustiada del menor. —¿Vienes a ver a Hyunjin, cierto?.—Preguntó recibiendo una respuesta afirmativa del chico.

—Sube, es la primera habitación a tu izquierda.—La chica indicó la habitación de su hermano, sabiendo que Felix al ser su pareja destinada podría calmarlo.

—¡Hyunjin!.—El omega irrumpió en la habitación percibiendo un aroma a café amargo por la alta cantidad de ansiedad que tenía el alfa, pudo localizar a Hyunjin sentado en una esquina del baño temblando, llorando y rebuscando entre sus cosas de higiene personal, soltando un suspiro aliviado cuando encontró una pequeña navaja de afeitar.

El menor al caer en cuenta en lo que el mayor planeaba hacer corrió hacia el, abrazándolo y tirando la navaja al piso.

El alfa hundió su cabeza en la curvatura del cuello de su omega, parte en donde el olor era más fuerte y las feromonas dulces se sentían más fuerte. —Lixie...—El mayor pronunció el apodo cariñoso entre llantos con el que había bautizado al chico hace mucho tiempo pero nunca se había atrevido a pronunciar.

—¿Que haces aquí?.—Pregunto. —¿Por que me buscas? No te merezco... Soy un estupido alfa que ni siquiera pudo decir bien lo que sentía.—Se reprochó a si mismo el mayor, ya más calmado.

—No digas eso, entiendo tus actitudes y todo Hyunjinnie...

—No te expreses así de ti, me parte el corazón oírte llamarte a ti mismo "Estupido".—Pidió el chico liberando sus feromonas al notar que hacían efecto.

—Te amo...—Confesó el alfa.

—Te amo también, te amo aunque a veces me causes insomnio.—Respondió Félix levantando su mirada para unirla con la de Hyunjin, ambos tenían los ojos llorosos y la voz quebrada.

Esta vez, el menor fue el que tomó la iniciativa y junto sus labios en una demostración de lo mucho que amaba a Hyunjin, en una demostración del amor incondicional que se tienen los dos. Porque Hyunjin y Felix lo hacen ahora y siempre se amarán.

Insomnio|HyunlixWhere stories live. Discover now