¡Al diablo! *EDITANDO*

No quiero que me vea

Capítulo 21

LEXY (P.D.V)

Corrí por los pasillos, oía también a mi hermano y a Brian corriendo detrás de mi. No me importaba armar escándalos a estas horas en el hospital, tenía que ver a mi hermano y tenía que verlo ya.

Entre a la habitación 365.

Pero allí no estaba, allí solamente estaban mis padres.

- ¿Lexy? -Preguntó mi padre poniéndose en pie rápidamente.

- ¿Dónde esta? ¿dónde está Gaby? -Prácticamente grité.

- Lexy, te dije que le estaban haciendo pruebas -Dijo Adrián.

- ¿Por qué? -Pregunté, casi no podía respirar, tenía una opresión en el pecho y no debido a la carrera. Tenía una opresión en el pecho debido a que estaba apunto de ver a mi hermano, después de dos años estaba apunto de verle despierto.

- Ha estado en coma dos años, es normal que tengan que hacerle pruebas -Intervino Brian.

Por un momento me había olvidado de que él estaba allí en la puerta, por un momento me había olvidado de donde me había escapado.. por un momento me había olvidado de todo.

- Lexy, maldita sea, ¿qué haces aquí? -Gritó mi madre.

Me asustó la manera en la que me gritó, mi madre, esa mujer que siempre estaba perfectamente vestida y peinada, hoy estaba con solamente un chandal puesto, una simple coleta de la cual se le salían unos cuantos mechones, el rimel corrido y los ojos totalmente rojos. Había pasado mucho tiempo desde la última vez que había visto llorar a mi madre.

- Mamá -Susurré, luego me salió un sollozo.

- Tienes que volver a ese maldito reformatorio -Dijo mi madre agarrándome del brazo.

- No, yo tengo que estar con mi hermano, te guste o no te guste, me voy a quedar aquí -Dije mientras me zafaba de su agarre.

- ¿No entiendes que irás a la cárcel? ¿de qué le sirve a tu hermano que estés aquí si vas a ir a la cárcel? ¿eh? respondeme -Me gritó.

- Jimena, suéltala -Dijo mi padre separándo a mi madre de mí.

- Solamente quería verle -Dije en un susurro que todos en aquella sala oyeron.

- ¿Querías verle? bueno, si querías verle simplemente no tendrías que haber robado ese maldito coche, no tendrías que haberte metido en drogas, simplemente deberías haber seguido siendo mi maldita hija, aquella que era buena persona y nunca se metía en problemas -Dijo mi madre soltándose de mi padre y volviéndose a sentar en una silla.

- ¿No entiendes que yo estaba cansada de ser aquella niña estúpida? casi no tenía amigos, no salía nunca -Grité- era una maldita aburrida, la gente en el instituto se metía conmigo, Gaby siempre me sacaba de los follones, él siempre me defendía, por eso cambié, porque lo que pasó fue culpa mía, porque necesitaba volver a sentirme segura.

- ¿Te sentías valiente robando el coche y metiendote droga no? -Preguntó mi padre cruzándose de brazos, jamás había visto una mirada tan enfadada en él- nadie de nosotros te echó la culpa por lo que pasó, porque no fue tu culpa Alexandra, eras una chica dulce y amable, una chica que siempre estaba sonriendo y divirtiendose con sus hermanos, eras prácticamente la alegría de la casa, pero cambiastes, dejastes todo de lado, empezastes a ser la que nos amargaba el día.. me duele decirte esto, pero es la verdad.. ¿realmente prefieres a la chica con la que siempre estamos discutiendo todos? o ¿prefieres a la chica a la que siempre abrazabamos y con la cuál sus hermanos jugaban? porque cuando Gaby vuelva, va a descubrir que su hermana, aquella pequeña hermana que tanto quería, ahora no le queda ni una pizca de lo que alguna vez fue.. ahora es una drogadicta.