🂱❝ flores de cempasuchil ❞🂱

79 8 0
                                    

━━ 🂱🂲🂳🂴🂵🂶🂷🂸🂹🂺🂻🂼🂽🂾 ━━

-no hagas tanto esfuerzo- pidió el oso al lado suyo.

Sostenía al mexicano de la mano aguantando la fuerza que el latino sostenía su mano por el dolor que sentía. No era un secreto que la Revolución había llegado a un intenso límite, pero lo que la mayoría no sabía era que el híbrido de pato había contraído una enfermedad por culpa del amor no tan correspondido y traición de Luzu.

Al principio se pensó que no era de importancia, hasta que poco a poco se notó que no era una cosa que se podría tomar a la ligera, ya que lo que empezó como toz fue pasando a peor siendo lo segundo toz con sangre y la respiración a veces entrecortada que tenía para que al final terminará escupiendo pétalos de flores, aún que eso no se compara al estado actual que lejos de mantener la calma solo preocupaba más. La toz no solo salía con pétalos sino que estos empezaron a crecer por su piel haciendo que el latino no se pudiera mover mucho dejándolo mayormente en cama por culpa del dolor.

No paraba de sentir raíces filosas amenazando con romperle la piel, flores que no lo dejaban respirar, pétalos que se azomaban en su rostro, brazos, piernas y probablemente sus alas serían las próximas víctimas de esas flores y pétalos de cempasuchil.

Quackity amaba las flores de cempasuchil pero ahora mismo era lo menos que quería ver cada que amanecía con más dolor que antes.

La comida ya no la necesitaba, su estómago estaba lleno de flores como para tener espacio para comida. Mantenía sus ojos cerrados por el dolor que sentía, juraba que todo era culpa de su mala suerte en el amor y la necesidad de sentirse querído por alguien también.

-ese té ya está listo?!- grito el oso al ver cómo Quackity dejaba de apretar su mano, dando señales de cansancio, probablemente la muerte.

-aqui está!- grito cochi corriendo en dirección al oso con la taza de té.

El oso agarro la taza con una mano y con la contraria tocó la mejilla del más débil para hacer que despierte un poco -Quackity soy yo, Rubius..- dijo con tranquilidad -ven toma este té para que te mejores-

Sin esperar respuestas levanto un poco al chico para lograr sentarlo cuasandole cierto dolor pequeño en el estómago, vio como poco a poco abria sus ojos estando casi entrecerrados miro la taza de té e hizo una mueca, realmente no tenía ni sed para tomar eso. Sentía que lo iba a vomitar tan rápido tomara un sorbo.

-es necesario que lo tome?- pregunto susurrando parándose para poder respirar.

-si Quacks, es necesario para que se te calme un poco el dolor- respondió Rubius dándole la taza a Quackity.

-dale primo que eso te va a curar- hablo Beni ahora, dándole un apoyo para que no se sintiera mal.

-esta bien...- y como si fuera lo más horrible del mundo se trago todo el té de un solo trago.

Apenas terminó sintió algo revolverse entre sus intestinos, hizo un movimiento rápido en vano puesto a qué le causó dolor, por suerte sus primos entendieron rápido lo que necesitaba y le trajeron un balde en donde pudo vomitar un montón de petalos bañados en sangre. Tomo su respiro luego de tal acción, se sentía horrible, no podía hacer nada, sentía que ya no quería hacer nada, después de todo no era como si esa enfermedad tuviera cura, por lo que se acostó de nuevo y se tapo con todas las mantas ya que sentía un horrible frío acechando su cuerpo.

🂱 ❝ⓒ𝐨ⓡтⓞ𝐒 𝕃Ⓤℂкⓘтʸ❞ 🂱Where stories live. Discover now