Rhaelyra lo vió, muerte, llanto, dolor, la extinción. Ella vió la danza de dragones y sabía que debía cambiar eso, tenía que hallar la forma de cambiar el destino y si eso implicaba destruir su vida, ella lo haría sin dudarlo.
Aemond Targaryen x oc...
Veo como Rhaelyra está sentada en el jardín, mi corazón se encoge al verla así.
Me acerco a hasta donde ella y veo como se limpia la cara, me sonríe y veo sus ojos rojos —No te levantes no es necesario —. Me siento con ella y acaricio su cabello, entiendo cómo se está sintiendo perdida, sola, sin entender que tendrá que hacer.
—Extraño a mamá —. Rompe a llorar y la atraigo a mi, dejando que se aferre a mis brazos, dándole la sensación de seguridad, su cuerpo tiembla y solo la abrazo más dejando un beso en su frente.
Es hija de Daemon, pero no tiene la personalidad de él, ella es dulce, inocente y amable, creyendo que no hay nada malo en este mundo.
Al igual que mi Helaena, no pienso dejar que ambas tengan que sufrir no bajo mi protección.
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Jamás llegué a imaginar que la pequeña Rhaelyra pediría nuestra protección, pero yo acepte al igual que Viserys.
Ella está sentada en su cama mientras yo escojo algunos vestidos, los colores son variados, pero más sobresale el rosado.
La tranquilidad se va cuando veo a Daemon y Rhaenyra entrando junto a Viserys, Rhaelyra se levanta para venir junto a mi. Me pongo enfrente de ella.
—Tranquila querida, ellos solo vienen a hablar —. Solo la miro a ella con una sonrisa y salgo con mi esposo.
Rhaelyra
Veo a mi tía Alicent salir, y entran mis hermanas junto con Jacaerys y Lucerys, salgo directo a abrazarlas, puede que hace solo un día las ví pero las extrañé como nunca. Daemon solo espera a que yo me separé del abrazo y me mira fijamente.
—Quiero que hablemos como familia Lys —. No lo quiero mirar, solo me enfoque en mirar a mis hermanas, no quiero tener está conversación.
—Lys, ¿Por qué hiciste esto? Pudiste hablar conmigo, pero decidiste dejar una carta a tus hermanas.
Cuando lo miro su mirada se suaviza, estoy llorando otra vez, no es obvio, no respeto a mi madre, no fue capaz de esperar ni una luna, no le importo ni un poco mis sentimientos, ni lo que mis hermanas sentían.
—Daemon —. Su mirada me refleja dolor, ya no lo he llamado papi, ni papá, solo quiero que sepa que es mi forma de que vea que voy en serio con mi decisión.
Se acerca hasta mi y veo a Rhaenyra que solo me sonríe levemente, Daemon se arrodilla hasta mi altura y pasa sus manos por mi cabello.
—¿Ya no soy papi? —. Solo niego y él deja un beso en mi frente y me susurra algo algo al oído.
—Avy jorrāelan —. Sonrió y dejó un beso en su mejilla.
—También te amo —. Me abraza y yo a él, quiero saber que es lo correcto y lo es cuando me doy cuenta que si no lo hago, jamás volveré a abrazar a mi padre.
