Una vida a tu lado (2) ✔️

Capítulo 18 "¿Al psicologo?"

ABRIL

—Que te ha dicho, ¿qué?

—Que va al psicólogo.

—Al psiquiatra mejor — dijo entre risas —. Te dije que no le hicieras caso, es muy cuentista.

—¿Y si es verdad? ¿Qué?

—Con veintisiete años ¿crees que sus padres la van a obligar? A parte, lleva diciendo lo mismo desde que salía con ella.

—Si tú dices que es mentira, te creo. Por cierto, ¿cómo está tu madre?

—Al final no fui.

—Pues recógeme y vamos.

—Saliendo de casa estoy.

—Ahora nos vemos — y le colgué.

Guardé todas las cosas y salí del camerino.

—¿Crees que se habrá tragado lo del psicólogo? — escuché decir a Sandra entre risas a lo lejos.

Yo me acerqué a ella y le toqué el hombro.

—No bonita, sé que es mentira.

Sin esperar a que me contestara salí, tras despedirme de la organizadora.

Puta Sandra, Darío tenía razón. Pero ¿por qué lo ha hecho?

Salí y esperando a Darío recibí una llamada de mi madre.

—Mamá, ¿qué pasa?

—¿Vas a poder venir a cenar el sábado a casa?

—Sí, ¿con la tita y las primas?

Y justo llego Darío y me subí al coche.

—Hola — y me besó.

—Mi madre — dije señalando el móvil.

—Es la sorpresa que te tengo por tu cumple.

—¿Vas a traer a tu novio?

—¿Quién sabe? — y me colgó.

—Ya hemos llegado — dijo Darío aparcando el coche.

—Que pereza, ahora a cocinar — dije entrando a nuestra casa.

—¿Por qué te crees que no he ido a ver a mi madre? — dijo cogiendo dos platos y llenándolos de pasta.

Nos sentamos a comer y la verdad es que todo estaba riquísimo.

—¿Quieres que vaya el sábado a cenar a casa de tu madre?

—Como tú quieras, mi madre ya te dijo que podías venir.

—Si es cena en familia, yo no pinto nada.

—Amor, tú eres mi familia — le dije y le di un beso —. Pero si no quieres venir, no pasa nada.

—Cuenta conmigo.

—Llamo a mi madre para decírselo.

Cogí el móvil y llamé a mi madre.

—No me digas que al final no vienes.

—Si voy mami, pero con Darío. No hay ningún problema, ¿verdad?

—Contaba con él, problema ninguno.

—Mami, es mejor que vengas hoy a ver la casa.

—No me viene bien.

—¿Qué estás haciendo?

—¿Segura que quieres saberlo?

—Vale, lo voy pillando.