O3. NaJeong/2Yeon → Nayeon G!P → Diferencia de edad de 12 años entre Nay y Jeong, si esto te disgusta, puedes saltearte este OS sin problema alguno ^^ → Mención de secuestro y drogas → Mención de SaMo →Vouyerismo: Dícese de la excitación sexual que siente una persona al ver a otra realizando un acto erótico o de igual forma, sexual
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[NA✓JEONG]
Lo único que escuchaba eran sus bajitos sollozos y los pasos grandes de esa pelinegra que la llevaba a la fuerza de su pequeña manita, seguido de sus pasitos que no se comparaban a los de la adulta. Su corazón latía con rapidez y de vez en cuando limpiaba sus ojitos por las lágrimas reveldes que trataba de no sacar, pero de alguna u otra forma terminaban escapando.
Observó un poco a su alrededor, notando los gigantescos cuadros perfectos que colgaban en las paredes del pasillo. Todos esos cuadros contenían la misma imágen de una extraña chica que hacía que a la pequeña Jeongyeonnie se le erizara la piel y forzara su agarre en la mano de la pelinegra japonesa. Las paredes pintadas de un vino resplandeciente que contrastaba perfectamente con el dorado de los bordes de aquellos marcos.
La chiquilla de cabellitos castaños también notó las grandes esculturas de cosas raras que habían paradas por el largo e interminable pasillo, causándole aún más miedo.
- Deja ya de llorar, mocosa. - Escuchó la voz de la adulta que la llevaba a quien sabe donde- Es mejor si te mantienes calladita, a Bunny no le gustan las bebés lloronas.
La niña de tan solo 8 años tensó su pequeño cuerpecito, limpiando sus lagrimitas con las mangas de su sueter amarillo. Bunny... ese... ¿apodo? se le hacía conocido. Escuchaba a su papá decirlo algunas ocasiones cuando tenía juntas importantes en el castillo real. Jeongyeon no sabía si era una persona o verdaderamente era un conejo, pero fuera lo que fuera, esperaba que no le hiciera daño.
Entonces la fémina mayor se detuvo en seco, haciendo que la infante imitara su acción, chocando con las piernas de la desconocida. "Toc toc toc", logró escuchar el suave toque en la gran puerta de madera oscura, esta era igual de grande que la puerta de su habitación en el castillo.
¿Será que la persona detrás de la puerta era también un rey como su papi, una reina como su mami o incluso una princesa como ella?, eso se preguntaba seriamente la castañita.
Un fuerte e imponente "adelante" se escuchó desde adentro. Entonces la pelinegra se adentró junto con la chiquilla a la habitación.
Los orbes miel de la pequeña lograron ver una figura fuerte, grande e intimidante. ¿Una chica?, ella tenía un cabello castaño lacio que le caía por los hombros, Jeong distinguió también los gruesos labios de la desconocida y lo que más llamó su atención, fue esa mascara blanca de conejo que tenía una raya roja que la dividía en dos, pequeños detalles dorados estaban alrededor de los huecos en donde los ojos avellana de aquella misteriosa fémina se dejaban admirar. También algunos cabellos rosaditos se mezclaban con las hebras chocolate.
