Transmigró para convertirse en la concubina masculina del tirano

Capítulo 31: Secreto

Shi Ye no se apresuró a responder la pregunta de Wen Chi, sino que preguntó: "¿Conoces a la familia Hua?".

Wen Chi asintió: "He escuchado un poco de ellos".

La familia Hua es la familia de la Reina de las Flores, y también es la familia más rica de toda la capital.

La familia de las flores es extremadamente misteriosa, especialmente el dueño de la familia que rara vez aparece frente a extraños, y muchas personas aún no saben cómo es el dueño de la familia.

Por supuesto, toda esta información proviene de la memoria del propietario original. Cuando Wen Chi leyó la novela, nunca vio la palabra "Hua".

Qué raro...

Wen Chi estaba pensando en eso cuando escuchó a Shi Ye decir: "La razón por la cual la familia Hua ha podido mantenerse en pie durante cien años es precisamente por esta habilidad innata".

"Su Alteza Real se refiere a..." Wen Chi reprimió su sorpresa y dijo suavemente: "¿El poder curativo de la sangre?"

Shi Ye no lo negó.

Wen Chi abrió los ojos con incredulidad, luego se quedó en silencio.

Inexplicablemente recordó lo que dijo la princesa mayor: la familia Hua no ha visto un bebé inusual en mucho tiempo.

No es de extrañar que el emperador tenga tanto miedo de Shi Ye, no es de extrañar que la princesa mayor tenga tanto miedo de Shi Ye, no es de extrañar que tanta gente codicie a Shi Ye en la oscuridad...

No puedo creer que haya tantos escenarios detrás de esta novela.

En ese momento, Wen Chi se sorprendió.

Se quedó en silencio por un momento, luego preguntó: "Su Alteza Real, ¿puede la sangre en su cuerpo curar alguna herida?"

Si este es el caso, Shi Ye también debería poder curar las marcas de quemaduras en su rostro.

No sé si Shi Ye de repente se rio de forma extraña después de escucharlo. . "

Cuando Wen Chi vio a Shi Ye sonriendo, sintió frío en todo el cuerpo: "¿Quieres probarlo?"

Tan pronto como terminó de hablar, Wen Chi sintió que las yemas de los dedos fríos tocaban su garganta, la voz severa de Shi Ye sonaba muy cerca: "Primero te cortaré la garganta con la mano y luego usaré mi sangre". para salvarte, ¿Qué dices?

Wen Chi: "..."

Las yemas de los dedos de Shi Ye ejercieron fuerza gradualmente y presionaron fuertemente la garganta de Wen Chi.

Aunque no sintió ningún dolor, todavía asustó a Wen Chi hasta que sudó frío.

El rostro de Wen Chi estaba tan blanco que no había sangre en absoluto, e inconscientemente abrió sus ojos almendrados.

Shi Ye vio su rostro reflejado en los ojos claros de Wen Chi, y de repente se rio entre dientes: "¿Qué dices?"

Wen Chi tenía un fuerte deseo de sobrevivir, e inmediatamente sacudió la cabeza como un sonajero

Preguntó: "¿No tienes curiosidad?"

"No no no..." Wen Chi no sabía si Shi Ye estaba sonriendo o no, de todos modos, cada tipo de sonrisa lo hacía sentir espeluznante, dijo apresuradamente: "Ya no tengo curiosidad, no puedo pensar, no sé nada, solo soy un simple plancton."

Shi Ye estaba un poco perplejo: "¿Qué es el plancton?"

Wen Chi respondió con tristeza: "Es un animal tan humilde y débil como yo".

Shi Ye dijo de repente: "Tal vez sea tan estúpido como tú".

Wen Chi: "..."

En ese momento, un repentino golpe en la puerta rompió el ambiente incómodo.

Antes de que Wen Chi respondiera, la gente que estaba afuera abrió la puerta y se apresuró a entrar.

"¡Joven maestro Wen! ¿Ha visto a Su Alteza Real?" Los pasos del eunuco Zhu sonaron de lejos a cerca, tal vez porque estaba demasiado ansioso, su voz era mucho más aguda que de costumbre, "¡Ouch, hey! Su Alteza Real se ha ido, los sirvientes han buscado aquí, pero aún no han visto a Su Alteza Real".

Mientras hablaba, el eunuco Zhu llegó al dormitorio de Wen Chi.

Wen Chi todavía estaba acostado en la cama, bien envuelto en la colcha, y avergonzado dijo: "Eunuco Zhu ..."

Desafortunadamente, el eunuco Zhu no lo escuchó en absoluto, ni siquiera volvió los ojos hacia un lado, y se arremolinó alrededor de la habitación como una hormiga caliente: "¿Qué puedo hacer? Los sirvientes son tan descuidados que ni siquiera conocen el paradero de Su Alteza Real el Príncipe..."

"Eso..." Wen Chi extendió la mano en la colcha, "Eunuco Zhu, escúchame..."

"Ese sirviente que descuidó su deber, debe morir..."

Wen Chi gritó: "¡Eunuco Zhu!"

El eunuco Zhu, que fue tomado por sorpresa, se estremeció de miedo, y luego se recuperó del miedo a la desaparición de Su Alteza Real, y volvió la cabeza para mirar a Wen Chi en la cama.

Wen Chi se había sentado en algún momento, se apoyó en la cabecera de la cama y luego levantó la colcha sobre él.

Ahora el eunuco Zhu finalmente vio claramente que todavía había una persona acostada al otro lado de la cama, y ​​miró más de cerca: ¿no es a quien ha estado buscando durante tanto tiempo? ¿Su Alteza Real el Príncipe?

El eunuco Zhu estaba a la vez sorprendido y encantado: "¡Su Alteza Real, el sirviente lo ha encontrado!"

Sin embargo, la alegría del eunuco Zhu no contagió a Shi Ye, no solo eso, el rostro de Shi Ye estaba tan negro que parecía que había estado atrapado en el fondo de una olla durante dos horas, miró al eunuco Zhu con ojos fríos y dijo: "Zhu Xian".

El eunuco Zhu tembló.

Shi Ye dijo: "¿Quién te permitió entrar?"

El eunuco Zhu inclinó la cintura y bajó la cabeza, todo su cuerpo se humilló en el polvo: "Este sirviente no encontraron a Su Alteza Real, y estaban ansioso por encontrarlo, así que me atreví a entrar sin preguntarle al maestro Wen..."

La voz de Shi Ye era extremadamente fría: "Fuera".

"Sí".

Después de decir eso, el eunuco Zhu hizo rodar su trasero.

Después de que el eunuco Zhu se fue, cerró la puerta.

El dormitorio volvió a estar en silencio.

Wen Chi no esperaba que Shi Ye atacara repentinamente al eunuco Zhu, dudó un momento con el rostro pálido, y luego recogió en silencio la colcha que había sido levantada y la volvió a cubrir con cuidado a Shi Ye.

Debido a su descuido, también cubrió la cabeza de Shi Ye.

A primera vista, parecía como poner un paño blanco sobre los muertos.

Wen Chi se quedó atónito por un momento, pero de repente esta imagen le dio mucha risa, no pudo contenerse y se echó a reír.

Después de reír, de repente se dio cuenta de lo que había sucedido, y rápidamente se tapó la boca con las manos.

Pero era demasiado tarde...

El sonido de "puchi" pareció hacer eco, y permaneció en los oídos de Wen Chi durante mucho tiempo.

Un silencio de muerte invadía el aire.

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Holisss, ha pasado un tiempo desde la última actualización 😅, pero como siempre estoy de vuelta jejeje.

Muchas gracias a todas las personitas que apoyan esta historia, y espero seguir trayéndoles cada ve más capítulos. 💜