Frágil

Capitulo 15

El amor puede darse en el terreno menos pensado, en el momento menos esperado.

No tiene nombre, no tiene sentido.

Puede hacerte mejor o cambiarte.

Escuche de repente un llanto, un bebe llorando, escuche las voces de las personas. De Alessandro, del doctor Giuliani.

No podía moverme de donde me encontraba, todo parecía pasar a mi alrededor de manera lenta. No podía hacer nada antes sus gritos.

—Alessandro —lo llame con voz miedosa—. Alessandro, por favor no me dejes sola —pedí.

Me desperté de golpe con aquella pesadilla, me removí entre las sabanas y descubrí que aún me encontraba sobre la cama. Cerré mis ojos dejando escapar mis lágrimas aun me dolía lo que había sucedido, ver aquellas fotografías, las tarjetas de invitación.

Sin embargo y a pesar de todo, decidí confiar en Alessandro para que dijera la verdad. Quería la verdad de una vez por todas.

Escuche unos pasos acercarse a la habitación, Alessandro abrió la puerta de la habitación y yo encendí la luz de lámpara de noche para verlo en la entrada.

—Chiara... —se acercó hasta mí y me rodeo con sus brazos—. Dime, ¿que ha sucedido?, vine tan pronto escuché aquel mensaje.

Trague en seco y limpie mis lágrimas.

—¿Cómo está tu padre? —pregunte primero.

La expresión en su rostro cambio por completo.

—Está mucho mejor, se quedara en observación, pero ahora está fuera de peligro —respondió y yo respire aliviada—. Lo que más me preocupa ahora es lo que me has dicho por teléfono, ¿a qué te referías? —enarcó una ceja.

Suspire.

—Míralo por tu propia cuenta —extendí las invitaciones en sus manos junto a las fotografías—. Han llegado esta noche. ¿Cómo puedo confiar en ti después de ver esto?

—Chiara... —susurró tomándolas en sus manos.

—Dime la verdad Alessandro, o juro que me volveré loca suponiendo cosas —le pedí.

Alessandro dejó a un lado las invitaciones junto a las fotografías.

—No significan nada —dijo al cabo de unos segundos—. Carina tenía organizado todo para la boda, supongo que han llegado aquí porque nunca las canceló.

Apreté mis labios.

—¿Tú me crees verdad? —preguntó.

Me quedé algunos segundos en silencio, no por el hecho de que no creyese en Alessandro, sino porque su situación con Carina aún me tenía desconcertada, no sabía que esperar de aquella mujer, menos cuando me había lanzado amenazas antes de irse.

—Ya no sé qué creer Alessandro —dije sincera—. Quiero creerte, pero Carina parece una sombra que nos seguirá hasta el final, no quiero... —hice una pausa—. No quiero vivir una vida que le partencia a otra persona.

Alessandro apretó sus labios, por un momento vi el enojo dibujado en sus pupilas.

—¿Crees que Carina ocupa aun un espacio en mi corazón Chiara? —cuestiono.

—Creo que ella fue importante en tu vida, y yo solo la desconocida que entro en las suyas para acabar con todo.

Un Alessandrp furioso hablo después de aquello.