A Florida.

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Empezó el año con energías... o eso para mucha gente, para mí, aunque había cumplido con el gimnasio me dolían las articulaciones al moverme, las idas con mi analista de fines de semana habían terminado, supuestamente el tiempo de presentación de nuevos poderes duraban de uno a dos meses, y al haberlos complido ya habían analizado en mi todo lo necesario, mis visitas con el psicólogo eran más como una charla, o una acumulación de anécdotas en un diario viviente, la verdad es que luego de las vacunas nada grandioso me había ocurrido, y aunque fueron aventuras emocionantes no extrañaba las sorpresas... o poner en peligro a mis amigos.

La gente del vecindario me veía con completa normalidad, en redes sociales las noticias de los furrys salvando gente se calmaron, aunque seguían habiendo casos ya no eran tan mencionados como antes, y eso también iba para mí, nada nuevo ocurría respecto a fans tanto en la vida real como en redes sociales, y eso pues me permitió vivir de forma normal.

Aún siendo vacaciones me puse a pensar en lo complicado que sería cumplir el horario del gimnasio sumando el horario de clases y el trabajo, nuevamente me había saturado, y mi mente no me ayudaba creando ideas tan continuas:

"Deberías componer canciones" "Deberías vestir así" "deberías..." "deberías..." y un largo etc. que eran ideas que realmente me gustaría hacer, pero que el tiempo no me daría, todo esto lo estaba analizando mientras veía mi tableta gráfica frente a la laptop, luego entonces escuché a Grace hablarme.

-Moon, ¡Te llegó una carta!- llamó.

Era extraño escuchar esa oración, sin mencionar que actualmente llegaban los correos de forma electrónica, supuse que mis padres me habían enviado algo, así que bajé las escaleras apresuradamente.

-¿Qué pasó?- pregunté.

-Te llego una carta- repitió dándomela completamente sellada, no quiso ni siquiera abrirla, pero en su mirada se notaba que tenía curiosidad por saber qué era.

No vi problema en ello, la carta venía en una hoja azul con adornos rosas y verdes bastante gruesa, con un sello dorado en la abertura, y con mi nombre arriba de dicho sello.

-Okey, esto definitivamente no es de mi familia- pensé en voz alta, ahora teorizando que solo era propaganda.

Mis ojos se iluminaron en el momento que la abrí encontrándome con una invitación a una convención, pero no una cualquiera, si no a una convención furry, en Florida.

Moon Dreams Lullaby
Enviamos esta carta con el deseo de que nos acompañes a la convención Furry Fun en Orlando Florida este 10 de Enero.

Tu historia de cómo salvaste a tus amigos y a todos los afectados por el Fur-Z en tu localidad de las personas en contra de los que disfrutaban el cambio entra perfectamente en nuestra categoría "Héroes con pelaje", donde se les otorgará un tiempo en escena para que puedas hablar del tema que gustes, responder preguntas y que el mundo te conozca. De aceptar esta invitación te esperamos en la siguiente dirección: ************
La entrada y los servicios vendrán por nuestra cuenta, esta invitación es válida para ti y cinco personas más.

Luego de esa información había algo de propaganda y el "S.A. de C.V." y un largo etc. y en una esquina había un sello, con el que supongo identificaban la invitación como real, luego de leerla no me di cuenta de que estaba hiperventilando de la emoción, mi cola se agitaba de lado a lado y mi cara esbozaba una larga sonrisa con un grito agudo.

-¿Moon?- preguntó Grace.

-Me invitaron a una convención furry en Florida- dije saltando de emoción, embriagada en felicidad cargué a Marjorie e hice como si bailara.

Ms. Lullaby Donde viven las historias. Descúbrelo ahora