Rhaella (Aemond Targaryen - Cregan Stark)

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Caminaba entre las calles de la ciudad, pasando desapercibida entre las personas era una suerte haber llegado sin que nadie se enterara, y la gran capa que traía ayudaba mucho, la capucha de la capa escondía mi cabello así nadie sabría quien soy y no alertarian a la guardia real.

La reunión por la disputa de quien será el nuevo señor de Driftmark, lugar que mi abuelo Corlys había dejado para mi, había empezado hace un rato.

Sir Vaemond estaba olvidando y pisoteando los decretos que mi abuelo había dejado y que el rey había aprobado. Y ahora quiere cambiar eso con ayuda de Otto Hightower.

Yo no podía enviar una carta renunciando a lo que por ley es mio y sederlo a Lucerys, el hijo menor de Rhaenyra y Leanor. Esas cartas suelen ser alteradas más si el trono está siendo dirigido por un Hightower cuando el rey no está presente.

Pase por el campo de entrenamiento y pude ver a los hijos de Rhaenyra y al parecer ellos no me vieron, se acercaron a ver el entrenamiento y ahí justo en el centro se encuentra, Aemond.

Ser Criston entrena con él. Me quede mirando por un rato. Sus movimientos son rápidos y certeros, pero no es tan bueno como creí. En cuanto terminaron dijo algo que no logre escuchar, pero miró con arrogancia a Jace y a Luke, para después mirarme a mi, pero en cuanto lo hizo me di la vuelta.

Camine entre los pasillos de castillo, hasta que la reunión comenzó.

Entre al salón del trono sin ser vista por los guardias, dentro había muchas personas que no tienen nada que ver con la familia espere en una esquina lejos de la vista de todos los presentes. Llegué justo en el momento.

Vaemond — mi tío abuelo — decía cosas sin sentido. Pero sin mencionarme en ningún momento. Yo solo observe. Cuando Rhaenyra intentó hablar mi viejo tío, el rey entro al salón, dejando a Otto, su mano con las palabras en el aire y este se levantó del trono. Pará darle el paso al rey.

El rey solicitó que mi abuela hablara ya que solo ella podía decidir acerca de la casa Velaryon ya que su esposo era el Lord.

—Mi esposo siempre a querido que la casa Velaryon pase a su primer hijo y Aerys lo fue, mi hija ya no está con vida, pero si esta mi nieta, la princesa Rhaella, ella es quien heredara Driftmark y será la señora de las mareas. — incluso habló acerca de comprometer a las hijas de Daemon con los hijos de Rhaenyra.

—Eso es un insulto para la casa Velaryon, Rhaell no ha estado presente desde que tiene 6 años, ella será la señora de Winterfell y a demás es una mujer. No puedo ni imaginar lo que eso provocará.

—Rhaella se ha preparado por años para ser una gran líder, ya sea de la casa Velaryon o de la casa Stark, ella es digna de dirigir cualquier casa. — dijo Rhaenyra.

—Entonces la princesa Rhaella, debe elegir entre el norte o el sur, ella decidirá si renuncia a su título o quiere dejarselo a usted, Sir Vaemond. —habló el rey.

—No pienso dejarselo a usted, Sir Vaemond. — hable desde mi lugar y todos se giraron a verme. — usted es mi tío y le tengo cierto afecto, pero aún no renunció a mi derecho de Driftmark y si lo hago tenga en claro que no será para usted. — dije eso mientras me acerca al centro.

Se que todos me miran, por que aun no me quito la estorbosa capa que traigo puesta, hasta que me acerque mas y la solté, baje la capucha y la capa callo al suelo.