where is my mind?

dos

Charles

Me levante perezosamente de la cama por la fuerte luz que venía del salón, siempre se me olvida cerrar la estúpida puerta de mi cuarto.

Gruñí y sin pensármelo dos veces salí dando un fuerte golpe a la puerta para que apagarán la luz.

Pero en vez de ver a mi hermano prepararse el desayuno como cualquier persona normal, ví como se tiraba en el sofá a un tía a la que no conocía de nada.

—¡¡Luke joder!! — me tape con una mano y con la otra tapando el cuerpo de la chica desnuda— ¡¡Tienes una puta habitación!!

—¡¡No sabía que te ibas a despertar gilipollas!!

—¡¿Como no me voy a despertar si tenéis la luz encendida y encima ni te molestas en cerrar mi puerta?! — le grite aún más fuerte.

—Chicos...

—Pues la próxima vez te vas de casa idiota, que encima de todo te quedas a vivir aquí sin pagar absolutamente nada.

—Nunca me pediste que te pagará algo.

—Chicos da igual, ya me visto... — intento hablar la chica.

—Si vístete por que enserio no es necesario verte desnuda en mi casa.

— Charles, borra eso que has dicho.

—¿El que? ¿Lo de desnuda?

— Si, es mi novia y ella puede hacer lo que quiera en mi casa— dijo más fuerte el 'mi' señalándose a si mismo.

—¿Perdona? — nos giramos a la chica ya vestida — yo nunca te he dicho que sea tu novia, yo solo te pedí que te acostaras conmigo, no que sea tu estúpida novia.

—Anoche me dijiste de ser novios.

—Lo habrás soñado mientras me follabas por que yo nunca he dicho eso, gilipollas— dijo mientras cogía sus cosas y salía del piso.

Mire a mi hermano quien todavía estaba desnudo enfrente mía, cogí los calzoncillos tirados del suelo y se los lancé a la cara.

—Vístete pedazo de guarro — dije antes de volver a mi cuarto para cerrar la puerta detrás mía.

Me tire a la cama perezosamente y saque mi móvil para revisar los cinco mensajes que tenía de una chica con la que me estaba hablando.

Daba asco sinceramente, decía de que ella le gusta chicos musculosos y que la consientan mucho.

Puede que sea un musculitos pero no gracias, vete con otro.

Le deje en visto y revise las historias de Instagram, me sorprendí al ver que tenía una nuevo seguidor, normalmente quien da a seguir soy yo, y me buscó yo los seguidores.

Leí el seguidor y por un momento me sentía el tío más feliz del planeta.

Una agencia de modelos de Londres me contacto hace meses para hacerme fotos y acepte y desde entonces agencias contactan conmigo pero esta, era de Vogue, nunca pensé que Vogue me empezaría a seguir por que si lo piensas solo soy un chico normal.