𝗧𝘂𝗿𝗿𝗶𝘁𝗮 ─ Santino Gallardo

09

Marina.

Me alejé del morocho una vez terminamos de chapar, y yo tenía una sonrisa de acá a la china.

─Decime, ¿el gato de Gallardo chapa mejor que yo?

Vamo a menti.

─Vos sos mejor qué él.

Y así pasamos pollereando unos minutos antes de qué toque el timbre para volver a las aulas, y yo me volví al aula.

No hice nada en todo el día por andar pensando en lo qué pasó hace unas semanas atrás, es decir cuando vi a Santino con Micaela chapar, y por alguna manera me hervía la sangre cuando me acordaba de ellos juntos.

¿Por qué mierda se la comió enfrente de mí el pelotudo?

─Yo debería haber estado en el lugar de esa ─pensé con bronca— No para, que chota estoy pensando.

Gallina de mierda, me está re confundiendo.

No sé qué mierda estoy empezando a sentir por él, pero no me gusta y me gustaría que me deje de gustar.

Un día me busca y al otro día se come a la ex enfrente mío.

Tiene que aprender a ser buenito como su hermano Matias.

Estaba mirando las destacadas que tiene el boludito con la cornuda de Micaela, le decía cosas horribles cómo "bombona" "te amo" "simplemente vos", y un corazón de mierda como su relación de gorreados.

Poquita bronca tenía.

─¿Te aburrís? ─preguntó Pilar mirando como miraba expectante el celular.

─No, me estoy re divirtiendo —respondo con obviedad y ella se ríe.

¿Qué puedo hacer un martes a las nueve de la mañana en pleno recreo?

Encima faltó la boluda de Sofia por andar pollereando con Laureano.

─Eu─Pilar me toca el hombro varias veces  hasta que la miro esperando a qué diga algo─ Santino viene para acá.

─¿Eh?

─Santino viene para acá Marina.

Miré para todos lados hasta que me doy vuelta, encontrándome con el gallina.

─La puta madre, gallina! ─puteo asustada y él solo se ríe— ¿No me hablaste en tres semanas y ahora venís a joderme de nuevo?

Miré para mis costados, y cómo siempre, la pelotuda de Pilar ya se había ido.

─Y bueno, en algún momento tenía que volver turrita ─respondió y yo rodé los ojos.

─¿A qué venías? Decime qué es algo importante así no pierdo mi tiempo en un wachin como vos.

Me acomodé la gorra y me crucé de brazos esperando su respuesta, y pude notar, que por primera vez o al menos frente mío, que estaba nervioso.

─¿Venís a verme al predio este sábado a las siete?

Bueno, me esperaba algo mejor, como que me regale una camiseta de la 10 de Riquelme, no sé.

─No.

Respondí dispuesta a caminar hacia Pilar y los demás del curso, pero sus manos suaves se apoyaron en mi cintura e impidieron qué me vaya.

Resoplé empezando a ponerme nerviosa.

─Bostera, me gust...

─Dale Santino, no me rompas más los huevos, no hay poronga que te venga bien boludo, dejame de joder.

Creo que era la primera vez qué lo llamaba por su nombre.

Me alejé de él dejándolo solo cómo un pelotudo y me fui para el aula, para mí mala suerte obviamente él tenía que entrar al aula conmigo así que entramos juntos.

─Mancini y Gallardo llegan tarde, ¿otra vez juntos? ─dijo la profesora mirándonos enojada─ La última vez qué se hicieron los vivos terminaron en dirección.

─Epaa, llegaron juntos —dijo Toto en voz alta y algunos del curso tiraron un "uhh" cómo siempre.

─Estábamos hablando nada más profe ─dije frustrada y el gallina asintió incómodo.

─Qué sea la última vez.

Ni bien la profe dijo eso, Gallardo y yo nos sentamos en nuestros respectivos bancos.

─¿Qué estaban haciendo vos y Gallardo? Se llega a enterar Martin que estuvieron juntos en el recreo y lo caga a trompadas a Santino —susurra Pilar, y yo solo miro como la profesora puta de matemática escribía los problemas en el pizarrón.

─Nada boluda ─contesté poniendo atención a lo que decía─, lo mismo de siempre lamentablemente.

─Para mí que es algo más, ¿no será qué te está empezando a gustar? ─me pregunta con curiosidad y yo niego con la cabeza— Vos me estás mintiendo Mari.

─No te estoy mintiendo Pili ─respondí rascandome la nariz.

Sí estaba mintiendo, mi lenguaje corporal hablaba mucho por mí.

─Ojalá Sofi estuviese acá, ella se da cuenta cuando mentís —habló volviendo a centrar su vista en el pizarrón.

Me di vuelta para sacar algo sin importancia de mi mochila, y ahí estaba él mirándome.

Pero no me estaba mirando cómo siempre, pero algo me hacía pensar que capaz esta vez, hay algo que en verdad cambió entre nosotros.

Me tiró una mini sonrisita cosa que nunca hizo o al menos conmigo, y ahí si fue cuando me di cuenta qué sí, efectivamente algo cambió entre nosotros.

No me tires esas miraditas flaco, por favor.

(💙💛💙)
bueno ahora sí, en el cap 10 se re pica, es lo único q voy a decir